LA UNIVERSAL (TOTI MARTÍNEZ DE LEZEA)

La Universal

Toti Martínez de Lezea

 Título: La Universal

Autora: Toti Martínez de Lezea

Editorial: Maeva, 2010

Encuadernación: Tapa blanda

Páginas: 301

PVP: 18,50 €

 TOTI MARTÍNEZ DE LEZEA

Esto es lo que su editorial nos cuenta de la autora:

Toti Martínez de Lezea (Vitoria-Gasteiz, 1949). Escritora. Vive en Larrabetzu, pequeña población vizcaína. En 1978, en compañía de su marido, funda el grupo de teatro Kukubiltxo. Entre los años 1983 y 1992 escribe, dirige y realiza 40 programas de vídeo para el Departamento de Educación del Gobierno Vasco y más de mil para niños y jóvenes en ETB. En 1986 recopila y escribe Euskal Herriko Leiendak / Leyendas de Euskal Herria. En 1998 publica su primera novela La Calle de la Judería. Le siguen Las Torres de Sancho, La Herbolera, Señor de la Guerra, La Abadesa, Los hijos de Ogaiz, La voz de Lug, La Comunera, El verdugo de Dios, La cadena rota, Los grafitis de mamá, el ensayo Brujas, La brecha, El Jardín de la Oca, Placeres reales, La flor de la argoma, Perlas para un collar, La Universal, Veneno para la Corona, Mareas, Itahisa, Enda, Y todos callaron, Tierra de leche y miel, Los grafitis de mamá, ahora abuela e Ittun.

Autora prolífica, ha escrito literatura para jóvenes con títulos como El mensajero del rey, La hija de la Luna, Antxo III Nagusia y Muerte en el priorato. En el tramo infantil, Nur es su personaje estrella, inspirado en su propia nieta. Ha publicado además ocho cuentos para contar bajo el Titulo genérico de Érase una vez…

Ha sido traducida al euskera, francés, alemán, portugués, chino y ruso. Habitualmente colabora con diferentes medios de comunicación y da charlas en universidades, asociaciones culturales y centros educativos.

En este blog puedes encontrar reseñadas las siguientes novelas de la autora:

-Hierba de brujas

-Itahisa

-Enda

-Y todos callaron

ARGUMENTO

Corren tiempos difíciles para la ciudad de Madrid. A la crisis económica provocada por la pérdida de las colonias y una sucesión de gobiernos ineptos y corruptos, hay que sumarle la represión policial tras el atentado del anarquista Mateo Morral contra la carroza real.

Los tiempos difíciles aguzan el ingenio para sobrevivir. Eso es lo que ocurre con Antón Ozaeta, que primero convierte la amplia casa de su mujer en una pensión y luego embarca a todos los miembros de la misma en una aparentemente disparatada tarea: montar entre todos un circo.

Al mismo tiempo, Ignacio Wallenstein, un joven abogado con un porvenir poco prometedor por delante y que también se aloja en La Universal, se ve envuelto en la investigación de la desaparición de un rico hombre, que según va descubriendo, estaba implicado en turbios negocios.

LA UNIVERSAL

Rescato de mi archivo personal la reseña de La Universal, una novela que me gustó mucho

A pesar de todo lo que había leído, esta novela supuso para mí una grata  sorpresa, porque lejos de relajarse y ofrecernos más de lo mismo, La Universal presenta interesantes cambios en su trayectoria habitual:

- El escenario: Nacida en Vitoria, buena parte de sus novelas están en una zona bien conocida y amada por ella: El País Vasco. En La Universal la acción transcurre por primera vez en mi amado Madrid, en una zona muy céntrica, la calle del Rollo, junto a la Plaza Mayor, dando a la calle Segovia junto a Puerta Cerrada (donde evidentemente hoy no existe ninguna puerta ni abierta ni cerrada)

Que los personajes se muevan por un escenario que conoces es una ventaja añadida que hasta ahora no había disfrutado con Toti Martínez de Lezea.

Madrid a comienzos del siblo XX

- El tiempo histórico: aunque en alguna de sus últimas novelas Toti Martínez de Lezea se había acercada a tiempos más cercanos como el siglo XIX, bien a principios en La brecha con el final de la Guerra de Independencia o a finales de la misma con Los hijos de Orgaiz y la segunda guerra carlista, es la primera vez que llega al siglo XX, aunque sea a principios del mismo.

Parte de un hecho puntual muy conocido: El atentado que sufrió Alfonso XIII el día de su boda al arrojarle el anarquista Mateo Morral una bomba desde una pensión de la calle Mayor de Madrid. Pero fuera de este hecho, no es una novela histórica con personajes reales entremezclados con otros de ficción, sino que toma este atentado que de un modo u otro altera la vida de los protagonistas, como punto de partida y el Madrid de la época como marco de la acción.

- Los personajes: En las novelas de Toti Martínez de Lezea aparece con mucha frecuencia un personaje central femenino de gran personalidad y fuerza de carácter, como Maritxu Altuna, la chocolatera de La brecha, Catalina de Goiena en La herbolera, María Pacheco en La comunera o María Esperanza La abadesa del monasterio de Nuestra Señora de Gracia. En La Universal también vamos a encontrar a Cecilia Beltrán de Salazar, una mujer adelantada a los tiempos, independiente, que trabaja, bien es verdad que en una empresa familiar, conduce un coche y no se corta a la hora de escoger a un hombre para llevárselo a la cama.
Pero es la primera vez que Toti Martínez de Lezea escribe una novela coral, donde no hay uno sino varios protagonistas, los moradores en la pensión La Universal. No puedo considerar coral una novela como La calle de la judería porque tenga varios protagonistas, puesto que se trata de una saga familiar que transcurre a lo largo de un siglo, mientras que en La Universal se desarrolla en un breve espacio de tiempo.

- Novela detectivesca. Es La Universal una novela que mezcla con desparpajo varios géneros. Es la primera vez que la veo usando en sus novelas las claves de las novelas de misterio o incluso las de la novela negra (será que el contagio nórdico es inevitable), pues la misteriosa desaparición de un hombre, mezclado al parecer en turbios negocios, implica a uno de los inquilinos de La Universal. E implicar a uno, es implicar en su ayuda a lo pensión completa.

LOS PERSONAJES

Antón Ozaeta un vasco (alguna relación tenía que tener algún personaje con la tierra de Toti Martínez de Lezea) que dejó a su familia para venirse a Madrid a buscarse la vida, para lo que termina montando un taller, aunque la crisis económica (a ver si vais a pensar que esto de la crisis es nuevo), le lleva a montar una pensión: La Universal. Al parecer Toti Martínez de Lezea se inspiró en un tío abuelo suyo del que poco más sabía aparte de que vino a Madrid, montó una pensión y luego un circo.

Eulalia es la esposa de Antón, un tanto beata a gusta de él y para colmo monárquica. Pero todo eso es poca cosa para lo que ella ha hecho por él, pues en realidad la casa es suya y fue ella quien lo ayudó cuando estaba a punto de darse por vencido en su aventura madrileña.

Don Juan José, el maestro sabio en paro por haber tenido la ocurrencia de preguntar a sus alumnos por qué querría alguien matar a un rey o a un presidente del Consejo de Ministros.

Benigno el guardia municipal.

Pepe Cantonal el anarquista, en un momento en que es muy peligroso serlo, pues anarquista era el que arrojó la bomba contra el rey Alfonso XIII. Además se alojaban en la misma pensión, por lo que la policía le detiene e interroga unos días, pretexto que usan en el trabajo para ponerle de patitas en la calle por faltar.
Con el llega a la pensión la '''Virtudes''', una prostituta harta de serlo, de la que Pepe era cliente habitual y que ha decidido retirarse con él.

Casilda es una joven misteriosa que Antón, con un corazón más grande que la pensión, ha recogido en la calle cuando la encontró pidiendo limosna y la ha llevado o la pensión para ayudar a Eulalia

Isidoro es un chavalillo que llegó ayudando a transportar el rótulo de la pensión y allí que se quedó.

Doña Patrocinio, la vecina del piso de arriba, que también termina en la pensión, donde continuará echando las cartas.

Ignacio Wallenstein es junto con Antón el principal protagonista de la novela. Es un abogado, el hombre más inteligente de su pueblo, aunque en Madrid eso nada significa, por lo que trabaja en un ínfimo puesto en una importante empresa de abogados.

IMPRESIÓN PERSONAL

No he encontrado todavía ningún libro de Toti Martínez de Lezea merecedor de un suspenso. Pero también es cierto que no he disfrutado lo mismo con todos. La Universal es sin duda el que más me ha gustado de sus últimas publicaciones.
Quizás porque en él se ve de un modo más patente un rasgo de la personalidad de Toti Martínez de Lezea que siempre agradezco en una lectura: el sentido del humor.

Sin quitarle un ápice de seriedad a los temas que nos presenta, '''es un libro que derrocha alegría e ilusión por la vida''', quizás contagiado por la bondad y las ganas de vivir de Antón Ozaeta.
En tiempos de crisis económica como la actual, por más que en el devenir de la historia nos olvidemos de que siempre hay ciclos de vacas gordas tras los que impepinablemente vienen tiempos de vacas flacas, es siempre de agradecer la actitud de aquellos que no se arrugan frente a las adversidades de la vida, las encaran con ingenio y alegría y además están siempre dispuestos a echar una mano al que lo necesita.

También me ha gustado la mezcla de géneros, que además de novela histórica tenga un toque de novela de intriga, como si de una novela de detectives se tratase.

En cuanto a la parte histórica, es un periodo de nuestra historia muy interesante y al mismo tiempo próximo como para que nos resulte muy fácil sumergirnos en él. El hecho de que la acción transcurra en Madrid, en una zona tan conocida como la calle Mayor, la calle Segovia, la Cava Baja, etc, hacen que la novela sea para mí sea mucho mas "visual". No hubiera estado de más, aunque bien es cierto que las editoriales no se molestan en cuidar esos detalles, que aparte de la fotografía que ilustra la portada, hubieran incluido alguna más del Madrid de la época.

Me permite esta novela extraer un ejemplo de mis dudas en las novelas históricas de hasta que punto, por más que algunas situaciones históricas tengan un gran paralelismo, que no aprovechen los autores para transportar pensamientos actuales al pasado. Esto es lo que nos dice Toti Martínez de Lezea al hablar de los políticos:

«Lo que en principio le pareció una actividad apasionante, acabó por aburrirle al descubrir que los discursos se repetían, que algunos representantes de la nación mentían como bellacos, que los diputados centraban su atención en echarse unos a otros a la cara todo a los males de España, en lugar de buscar soluciones a la falta de trabajo, la pobreza, el hacinamiento en los barrios obreros, la inmigración y la atención sanitaria. A veces, ni siquiera asistían a los plenos y daba la impresión de que el país estaba siendo gobernado por cuatro ciudadanos que bostezaban o leían la prensa mientras un orador recitaba su ponencia con una voz monótona, capaz de dormir a un insomne». (Página 141)

Creo que a lo largo de mi exposición ha debido de quedar muy claro que esta es una novela con la que, pese a no ser perfecta (en la trama detectivesca en algún momento hubiera necesitado echar mano de papel y lápiz como hace Ignacio Wallenstein para no perderme en el enredo de familia y parentescos), he disfrutado mucho a lo largo de sus páginas, de manera que se hace corta.
Es pues La Universal, una novela imprescindible para los seguidores de Toti Martínez de Lezea. Para los que no la conocéis, ésta puede ser una buena oportunidad para una primera toma de contacto con esta autora.

VALORACIÓN: 9/10

Si quieres conocer más reseñas de novela histórica, pincha AQUÍ