jueves, 4 de junio de 2020

PRÓXIMA ESTACIÓN (MÓNICA GUTIÉRREZ)

Próxima estación
Mónica Gutiérrez


 Título: Próxima estación
Autora: Mónica Gutiérrez
Editorial: Autopublicado, 2020
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 238


 MÓNICA GUTIÉRREZ

Esto es lo que la autora nos cuenta de sí misma:

Mónica Gutiérrez Artero nació y vive en Barcelona. Licenciada en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, y en Historia por la Universitat de Barcelona, su carrera profesional se desarrolla en el ámbito de la comunicación y la enseñanza.
En la actualidad cuenta con siete novelas publicadas
"Cuéntame una noctalia" (Amazon, 2012)
"Un hotel en ninguna parte" (Amazon, 2014)
"El noviembre de Kate" (Roca editorial, 2016)
“La librería del señor Livingstone” (Amazon, 2017)
“Todos los veranos del mundo” (Roca editorial, julio 2018)
“El invierno más oscuro” (Amazon, 2018) (con seudónimo)
“Próxima estación” (Amazon, 2020)

Sus novelas cuentan historias cotidianas con un punto de vista humorístico, al estilo de P. G. Wodehouse, E.F. Benson, Arnold Bennett o D.E. Stevenson.
El género literario en el que se enmarcan es el feelgood que tuvo su época de esplendor en la Gran Bretaña de la Segunda Guerra Mundial con autores como P. G. Wodehouse, Stella Gibbons, Dorothy L. Sayers, A. G. Macdonell, James Herriot, Frank Baker, E. M. Delafield, etc. Una tradición de género literario que hundía sus raíces en los inicios de ese mismo siglo y a finales del XIX, con autores que se desmarcaron de la literatura de Virginia Wolfe, D. H. Lawrence o James Joyce, por ejemplo, para seguir senderos más ligeros y algo singulares para la época, como E. F. Benson, Earl Derr Biggers, George Barr MacCutcheon, Winifred Watson, o Arnold Bennett, entre otros.


En este blog puedes encontrar reseñadas las siguientes novelas de la autora:






ARGUMENTO de PRÓXIMA ESTACIÓN

Sigrid es invitada por su amiga Angela a participar en la convención anual hotelera, que tiene lugar a bordo del Orient Express, a pesar de que sabe que le quedan solo dos semanas en la empresa pues va a dejarla para cumplir su gran sueño: trabajar como conservadora en un museo.
Un viaje mágico en el que tendrá que hacer frente a sus fantasmas del pasado, a aquello que deseó y perdió, que vuelve a ponerse delante de ella en su vida. 
«Me hablas como si no tuviese corazón y lo único que intento es encontrar la valentía necesaria para salvaguardar los pedazos que me quedan». (Página 175)






Lectores al tren

PRÓXIMA  ESTACIÓN

De la mano de Gilberto, Agente de Acompañamiento, Mónica Gutiérrez nos invita a un viaje en el mítico Orient Express. Bueno en realidad es el Belmond Venice-Simplon Orient Express.
«Pero queda muchísimo más dramático decirle a los pasajeros “Bienvenidos al Orient Express” que todo ese rollo de Venice-Simplon bla bla bla». (Página 14)

Orient Express

Una figura hábilmente creada por la autora para darnos a conocer sin que resulte excesivamente forzada, la historia de este mítico tren, restaurados sus vagones hasta convertirlos en una réplica de aquellos que un día recorrieron Europa:
«Creo que Gilberto es un enamorado de este tren y que lleva su mademoiselle con la misma pasión con la que consulta su reloj de bolsillo o su silbato de fefe de estación. No es más que atrezo para mantener la ilusión del Express d’Orient original». (Página 220)

Sí, el mítico Orient Express:
«Es el Orient Express. Princesas y reinas, primeros ministros, escritores, artistas, espías, celebridades de todo tipo viajaron en estos mismos vagones a lo largo de casi todo el siglo XX, y antes, en las últimas décadas del XIX, Agata Christie, Graham Greene, John Dos Passos, Sidney Lumer, Churchill, Poirot, James Bond…» (Página 15)

Un tren que va maravillando vagón a vagón:
«Los apliques, los espejos, cada uno de los detalles de la decoración eran premiosas obras de Art Decó». (Página 17)


Un tren para un viaje en el que Sigrid ira invitada y acompañada por su amiga Ángela. Todo un carácter
«La indestructible abogada y directora general Ángela Llorente, tormento de los recepcionistas, azote de los maître, guardiana del hall e infierno de los subdirectores y demás gerentes». (Página 11)

Un contraste entre ambas que dará pie a buenos momentos de humor a lo largo de la novela:
«Discúlpela, es abogada, no sabe lo que es romanticismo a menos que lo busque en un diccionario». (Página 31)

El sentido del humor de Sigrid no apunta solamente hacia los demás, que también apunta directamente contra ella misma, que no escapa a sus agudos comentarios:
«Un programa de cocina del que todo el mundo hablaba y que yo no había visto nunca porque las historiadoras tenemos la lamentable costumbre de ignorar la televisión y admirar las piedras». (página 61)

Un humor que será puesto a prueba a lo largo del viaje cuando no tenga otro remedio que enfrentarse a su pasado, z aquello que tanto le ha hecho sufrir y que tiene aún lejos de haber asumido: la ruptura con el hombre que amaba.
«Qué difícil es explicar una relación o una ruptura por cosas tan pequeñas que se hacen grandes con el desgaste y el uso». (Página 152)






OPINIÓN PERSONAL

Si te gusta el feel good, seguro que disfrutarás con Próxima estación, una novela “amable” como todas las de la autora, que viene en este caso cargada de mucho humor y romanticismo. Probablemente sea la más romántica de todas sus novelas, lo cual para alguno de sus lectores será un punto positivo, aunque en mi caso no lo es. Simple cuestión de gustos.
Aunque no todo es amabilidad, porque por más bonito que sea el viaje (¡cuidado con leer esta novela en momentos de hambre!, que hay demasiados desayunos, comidas y cenas a lo largo de la novela como para despertar el hambre del más inapetente), la protagonista tendrá que enfrentarse a sus sentimientos, al miedo, a la incertidumbre…

En fin, un viaje maravilloso al que Mónica nos invita. ¿Te animas a subirte al tren?




ALGUNAS PERLAS

Según usos y costumbres, a lo largo de la novela nos deja Mónica Gutiérrez algunas perlas en forma de reflexiones. Voy a dejaros un par de ellas, pero os invito a que busquéis las vuestras: 
«Nada es para siempre. Salvo el recuerdo de los que amamos». (Página 95) 
«La vida, como Twitter, debería tener un modo oscuro, Se nos cansan los ojos de tanto brillo, de tanta pantalla y tanta claridad, y es solo en la noche, al amparo del silencio, la soledad y la sombra, cuando somos capaces de proporcionar a nuestros pensamientos el contraste necesario para encontrar un poco de luz». (Página 177)




VALORACIÓN: 7/10 

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5 comentarios:

  1. De la tendencia feelgood novelística que se hace en España sin duda alguna las novelas escritas por Mónica Gutiérrez Artero son las que más me gustan. Sobre todo me encanta el sentido del humor que en ellas despliega. Esta "Próxima estación" ocupa ya desde este momento un lugar en la lista de pendientes a la espera de que le llegue el turno.
    Un abrazo

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  2. Muchas gracias por leerme, Pedro, aunque ya te advertí que esta me había quedado más romántica ;-) Me encantan las frases que has anotado y que te haga tilín ese sentido del humor que tú siempre luces. Un abrazo y mil gracias.

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  3. Mira que me gustan los libros de Mónica, pero esta vez no sé si termina de llamarme la atención la historia. Por el momento lo dejo en duda.

    ¡Besos!

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  4. La tengo pendiente y voy advertida con ese toque más romántico de la novela. Buena reseña.
    Besotes!!!

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  5. Leer a Mónica es un seguro de felicidad. He leído todas sus novelas (y alguna de ellas dos veces) y siempre se me queda cara de boba cuando termino la última página y esta vez, no ha sido menos. La historia es preciosa y los personajes... ¡ay, los personajes! Me he sentido tan identificada con la falta de orientación espacial de Sigrid, ¡¡yo me perdí en un Zara!!.
    Gracias por la reseña Pedro

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