El hipnotista
Lars Kepler
Autor: Lars Kepler
Editorial:
Planeta, 2010
Encuadernación:
Tapa blanda bolsillo
Páginas: 616
Esto es lo que la editorial nos cuenta
del autor:
Lars Kepler es el
seudónimo de Alexander Ahndoril y Alexandra Coelho Ahndoril, un matrimonio
sueco de escritores. La novela El hipnotista (Planeta,
2010, y primera de una serie) se vendió en todo el mundo bajo el seudónimo de
Lars Kepler con la intención de que la identidad de los autores permaneciera en
secreto. Sin embargo, y debido al éxito internacional de la obra, decidieron
salir a la luz y mantener el seudónimo. Tras el éxito de El
hipnotista, Planeta publicó El contrato en 2011. La vidente es su nueva
novela, el tercer volumen de la saga.
ARGUMENTO de EL HIPNOTISTA
Una familia es salvajemente asesinada.
Solamente Joseph, el hijo de quince años, a pesar de las múltiples puñaladas
recibidas consigue sobrevivir.
Nada se sabe de las posibles
motivaciones para tan horrendo crimen, por lo que urge localizar a Evelyn, la
hermana mayor, cuyo paradero se desconoce, pues se sospecha que puede ser la
próxima víctima del asesino.
Por eso el inspector Joona Linna
convence al psicoterapeuta Erik María Bark para que vuelva a practicar la
hipnosis diez años después de haberlo dejado, e intentar saber qué pasó y cómo
salvar a Evelyn.
Al hacerlo, se ponen en marcha sucesos
que afectarán gravemente a la familia de Erik
EL HIPNOTISTA
Portada original |
Paso a rescatar de mi archivo personal
una novela que dio origen a una serie, la del inspector Joona Linna.
La serie está de momento formada por las
siguientes novelas:
El hipnotista, 2009
El contrato, 2011
La vidente, 2012
El hombre de arena, 2014
En la mente del Hipnotista, 2015
El cazador, 2018
Me llaman la atención los libros que
están en la lista de los más vendidos, porque en principio algo tendrán, aunque
ese "algo" a veces sólo sea una buena campaña de promoción.
Entre ese éxito de ventas y que el tema
del hipnotismo, de que una persona pueda cometer actos en contra de su voluntad
o de su naturaleza inducida por otros da pie a interesantes argumentos, me
animé a leerlo con interés.
Empezaré por el principio, por lo que
los autores en la primera página nos cuentan sobre qué es el
hipnotismo:
«En la mitología griega, el dios Hipnos
es un muchacho alado que lleva en la mano una amapola. Su nombre significa “sueño”.
Es hermano gemelo de la muerte e hijo de la noche y la oscuridad».
Nada más adecuado que una amapola,
porque la aparente inocencia de la misma (Papaver rheas), esa flor roja tan
frecuente en nuestros campos, deja de serlo cuando del fruto de una de sus
variedades (Papaver somniferum) se obtiene el opio, aunque sea con un trabajo
de chinos (nunca mejor dicho), fruto a fruto dándole un corte a determinada profundidad
y en un momento determinado del día para recoger el látex que brota por el
corte y en el que se encuentra el opio, potente inductor al sueño (entre otras
cosas). Sueño, muerte, noche y oscuridad, términos que en muchos casos van
entrelazados.
El término «hipnosis» fue utilizado por
primera vez con su significado actual en 1843 por el cirujano escocés James
Braid. Con esa palabra describió un estado similar al sueño, de aguzada
atención y gran receptividad. Hoy en día está científicamente demostrado que
casi todas las personas son susceptibles de ser hipnotizadas, aunque aún varían
las opiniones sobre la utilidad, la fiabilidad y los riesgos de la hipnosis. Probablemente
esta ambivalencia tenga que ver con que se ha hecho un mal uso de la misma por
parte de embaucadores, artistas y servicios secretos de todo el mundo.
En el fondo, la realidad es que a la
hora de pensar en la hipnosis, prevalece en mi ese aspecto de montaje de
espectáculo, tan falso y trucado como esos espectaculares números de desaparición.
Desde un punto de vista puramente
técnico, es fácil llevar a una persona a un estado de conciencia hipnótico; lo
difícil es controlar el desarrollo, acompañar al paciente, analizar y manejar
el resultado. Sólo con una amplia experiencia y una gran capacidad es posible
dominar verdaderamente la hipnosis profunda. En todo el mundo no hay más que un
puñado de verdaderos expertos en hipnosis con cualificación médica.
Inspector
Joona Linna
He aquí lo que de él se dice en la página
web de libro:
«Lo que hace incómodo a un personaje no
es su origen. Es, sobre todo, su testarudez. Joona Linna es un detective de
origen finlandés. Vive y trabaja en Estocolmo desde hace años, pero nunca se ha
llegado a integrar en la ciudad. Desde luego, su carácter no ayuda: es muy
tozudo, _oco le importan los honores y las medallas, y cuando está seguro de
tener razón, no tiene miedo de enfrentarse a quien sea, ni a sus superiores,
para demostrarlo_. Pero el caso que cae en sus manos la noche del 8 de
diciembre parece demasiado, incluso para él...»
Pensaba que era cosa mía que el
inspector me resultara antipático, pero ya veo que no le cae bien ni a sus
propios autores. No es tanto su tozudez, como el ir de sobrado por la vida. No
soporto esa infalibilidad (por más que sea literaria). Y no es algo nuevo en
mí, que nunca soporte el desprecio de Poirot (el célebre inspector de Agatha
Christie), ni me hacía gracia el "Elemental, querido Watson" de
Sherlock Holmes.
«-Te creo, siempre tienes razón, ¿no es
así?
-Si, así es.
-Si una no te cree, luego tiene que
soportar que vengas diciendo “¿Qué te había dicho?”». (Página 549)
El
hipnotista, Erik Maria Bark
He aquí lo que de él se dice en la
página web del libro: «Psicoterapeuta de gran competencia y profesionalidad,
Erik se niega a practicar, desde hace diez años, la disciplina que le concedió
notoriedad y reputación: el hipnotismo. El motivo es muy concreto y permanece
oculto en su pasado... Pero la noche del 8 de diciembre cambiará la situación
para siempre: cuando su hijo hemofílico es secuestrado por uno (o unos)
desconocidos, ya nada podrá seguir oculto».
Es este un personaje mucho más
conseguido. Su pasado y el por qué de su actitud es algo que iremos descubriendo
poco a poco con el discurrir da las páginas, contribuyendo a mantener la
atención y la tensión del lector.
Su capacidad para el hipnotismo no se ve
como algo teatral o circense, sino como un fruto de la investigación y el
trabajo científico.
Frente a la infalibilidad de Joona
Linna, se nos presenta como alguien mucho más humano, con problemas
matrimoniales, con un hijo enfermo al que cuida con esmero, y con un lado
oscuro: su no confesa adicción a las pastillas.
IMPRESIÓN PERSONAL
Primera portada |
¿Novela negra? Más bien su color es el
rojo que salpica las primeras páginas y que de vez en cuando vuelve a
reaparecer. La portada original (ahora está descatalogada y por eso os he
puesto en la ficha la de la edición de bolsillo) es una timidísima reproducción
del crimen con el que comienza la novela, porque parece casi un crimen
"limpio".
LO MEJOR
Sin duda lo mejor de este libro es la capacidad que tiene para atrapar al lector entre sus páginas. Lo más curioso
es que no es el crimen inicial, del que en no muchas páginas sabemos ya quién
es el culpable y por tanto disminuye considerablemente la tensión, sino otra
trama, al principio aparentemente secundaria, como es el secuestro de una
persona, que obliga al hipnotista a bucear en su pasado, aquel que le llevó a
tomar la decisión de abandonar la práctica del hipnotismo en busca de las
claves que permitan la resolución del secuestro.
LO PEOR
Puede parecer mentira que un libro que
atrapa y que tiene una correcta resolución final de la trama tenga una
valoración tan baja. Pero es así porque a mi parecer tiene dos graves defectos:
-De los dos protagonistas, me fue imposible empatizar con el inspector. Ya expliqué
antes como no soporto esa arrogancia, esa infalibilidad que impide ver el lado
humano del personaje.
-Con todo, no es eso lo peor, sino que
en algunos momentos los hechos narrados son
inverosímiles.
Podríais pensar que tratándose de hipnotismo, es posible que en un momento dado
sea necesario recurrir a un tanto de fantasía. Pero no es así, esa es
precisamente la parte más creíble del libro.
Me ha traído a la memoria a Dan Brown,
el gran especialista en momentos increíbles, como aquel de un hombre cayendo
desde un helicóptero a gran altura y llegando sano y salvo al suelo..
No quiero destriparos la trama (si lo
has leído no me importa aclarártelo por privado), pero hay en ella un par de
acontecimientos imposibles capaces de descalificar completamente el libro.
¿Recomiendo
el libro?
Pues ni si, ni no, sino todo lo contrario. Es un libro muy entretenido, un
tanto gore en algunos pasajes, aunque no tanto como para dejarlo, pero que
requiere la complicidad del lector para aceptar pulpo como animal de compañía
para seguir leyendo. Algo que visto el éxito de ventas parece que trae al
personal sin cuidado.
Si tu eres de los que no admites fallos
en los guiones o en la trama, mejor no lo empieces.
Hay una versión cinematográfica de la película
VALORACIÓN: 4/10
Si quieres comprar el libro pincha en la imagen correspondiente:
A mí me aburrió mucho.
ResponderEliminarMenos mal que al menos es entretenido. Pero no creo que me gustara con esos fallos. Así que lo dejo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Tengo pendiente estrenarme con el autor, aunque no será con este...
ResponderEliminarBesotes