Me las prometía muy felices. Dos
semanas, que ya tenía claro que iban a ser más, sin recibir libros y con más
tiempo para leer, sin duda iban a bajar mi inmensa lista de libros pendientes.
Pero mi gozo en un pozo, no había manera de avanzar en mis lecturas.
No se trata de un bloqueo lector. No se
trata de que me aburra leyendo. No se trata de que no me apetezca leer. No,
esto es muy diferente.
Pensaba que era una cosa que me pasaba
solo a mi, hasta que empecé a ver comentarios en twitter en los que comprobé que
a muchos lectores les pasaba lo mismo. En fin, me aplicaré, sobre todo en estos
tiempos que corren ese dicho de «Mal de muchos, epidemia».
Yo ya sé que tengo momentos muy
peligrosos para leer, como el de leer un rato antes de comer, que con eso de la
hipoglucemia me empieza a entrar una modorra y buena parte de lo que lea en
esos momentos lo voy a soñar, mezclando lo que estoy leyendo con una versión
inventada por mi mente. ¡Lástima de ser fogonazos que se me olvidan! Porque
sería una manera divertida de reescribir un libro completo.
Pero lo que me sucede ahora es
totalmente diferente. Mi mente me lleva inevitablemente cuando estoy leyendo a
mezclar lo que leo con la acuciante actualidad que estamos viviendo. ¿Cómo van
a pasear los personajes si estamos encerrados? ¿Cómo pueden pasearse
alegremente por un hospital? Y si encima el libro tiene relación con la muerte
de alguien ni os cuento.
Eso hizo que “estropease” una gran
novela como Aquella vez en Berlín de María José Moreno, una novela que consigue profundizar en sus
personajes desnudando su alma, porque me resultaba demasiado triste.
Paré la lectura, no porque considerase
que la novela era mala, sino buscando un estímulo diferente, algo que me
evadiese de la realidad y me fui directo a un thriller.
Me fui al último thriller de Javier
Castillo La Chica de nieve, esperando en un buen thriller esa evasión que
buscaba en la lectura. Batacazo.
¿Culpa del libro o culpa de mi mente?
Por si acaso era culpa mía, le inflé un poco la nota al final. Aunque a lo
mejor mi mente me estaba permitiendo como a aquel niño inocente del cuento, ver
que el rey estaba desnudo, descubrir la falsedad de los artificios del autor
para hacerme creer que había mucha acción y ver que en realidad ni había tal ni
nada nuevo me aportaba. No lo sé
Rematé en silencio, (vamos, que me
busque un lugar silencioso en casa para poder concentrarme) Aquella vez en
Berlín, una novela en la que me pasó justo lo contrario, que sé que hubiera
valorado más alto en otras circunstancias.
¿Qué leer entonces? Me volví a Tierra de Eloy Moreno,
una novela con muy buenas críticas y ¡¡¡por fin!!! Una novela que me ha
enganchado desde la primera página y de la que ayer me leí 250 páginas. Bien es
verdad que son capítulos muy cortos, mucho espacio en blanco y que en otra
novela serían bastante menos páginas.
No solo es que sea ágil, sino que sin
ser un libro de fantasía, tiene elementos del mismo, sin ser una distopía, nos
acerca a un futuro tan próximo que ya está aquí y sin ser un thriller tiene el
ritmo de tal.
Probablemente sea una novela que
sobrevalore en mi apreciación final, pero al menos me ha reconciliado con mi yo
lector.
Probaré a continuación a volver a mi
lugar de confort, a la novela negra para ver si allí vuelvo a sentirme cómodo,
porque si no, tal vez la solución sea seguir moviendo mi imaginación lectora por esos mundos de
fantasía, aventuras o distopías, o probar con otro género como la novela
histórica. O sea, cualquier cosa alejada de nuestra realidad.
Os seguiré contando. Pero ahora contadme
vosotros ¿cuál es vuestra experiencia lectora estos días. ¿Cómo os sentís
leyendo? ¿Qué tipo de libros son los que os ayudan y cuáles en los que os
atascáis? ¿Qué géneros os funcionan?
Rara vez os pido comentarios en mis
entradas, pero ese caso es una excepción que nos puede servir a todos de ayuda.
Y q gran placer. Yo estoy con la chica de nieve
ResponderEliminarNo sólo leer. Intento sacar trabajo atrasado, cocino más ... pero cualquier cosa que haga es como si la estuviera haciendo en otra dimensión y me "autoviera" en una película. Suelo hacer reseñas de libros, escritos diversos, comentarios jurídicos ... Pues bien, no me sale nada. Ya he hablado con algunas personas lectoras que les está pasando algo parecido. Aun así, leer es lo mejor y el mejor rato del día.
ResponderEliminarHola. A mi lo que me cuesta es escribir, tengo el blog con un montón de reseñas pendientes. Como sigo leyendo va aumentando y aumentando...
ResponderEliminarAhora estoy con El secreto del orfebre. Ánimo a todo el mundo. Un abrazo
Yo estoy leyendo al ritmo normal, si bien he tenido algún problema de concentración. Todos los libros que tengan un argumento que me interesen lo más mínimo me valen. No noto diferencia entre géneros, porque lo que importa es tratar de sobrellevar el confinamiento antes que otra cosa. Leí antes de ayer «Enemigos de Esparta» (novela histórica).
ResponderEliminarComplicado todo: leer, escribir... Las noticias te/me hacen caer en una situación de sopor e inepcia preocupantes. Parecería que el ascenso de la afectación me abduce y me va incorporando al gremio de pacientes. Es una situación nueva que lógicamente nos saca de nuestras zonas de confort. La verdad es que el confort es algo que existió pero que esta infección planetaria ha hecho saltar por los aires.
ResponderEliminarYo estoy leyendo una novela que me ha enviado un escritor novel y la verdad es que me está costando un poquito.
Quiero leer la última que tú citas, "Tierra" de Eloy Moreno. Le llegará su turno, sin duda.
Un abrazo
Mi marido está yendo a trabajar con normalidad, yo de ERTE en casa con los dos peques, de 6 y 2 años. Así que solo tengo para leer mientras están dormidos, en la siesta y a la noche. Para mí la lectura siempre ha sido un refugio y estos días me viene genial para desconectar de todo lo que está pasando. Desde el viernes 13 a la tarde que nos metimos en casa ya no hemos vuelto a salir y en estos días he leído cinco libros, hoy terminaré el sexto. Al principio me costaba concentrarme y aislarme de la situación, pero en casa decidimos no poner las noticias ni en la radio ni en la tele, verlas únicamente en Internet, para aislar a los peques, sobre todo al mayor, de toda esta locura. A mi marido también le gusta mucho leer y los dos estamos aprovechando mucho. Muchos besos. Cuídate.
ResponderEliminarYo estaba con La sospecha de Sofía y en cuanto se declaró el Estado de Alarma, noté que leía mucho menos ya que mi nivel de concentración descendió. Parece que ya me acostumbré a esta situación y logré acabarlo. Ahora empecé a leer un libro de lectura ligera y aprovecho el tiempo de espera en la cola del supermercado para leer algo. Besos!
ResponderEliminarEstá resultado complicado todo: leer, escribir... Tengo que ponerme a escribir reseñas pero mi cabeza no quiere. Y me pongo a ver series y ni así desconecto. La veo pero no la disfruto. Está costando... Si hoy he estado leyendo un poco, he visto la palabra "máscara" y lo primero que se me ha venido a la cabeza son las mascarillas. Y no, se refería a máscara de carnaval... Al libro de María José dale una oportunidad cuando salgamos de todo esto, que es una delicia. Yo con Castillo tropecé con su anterior libro y no creo que me anime. Con Tierra me tientas. Mucho ánimo! Y cuídate mucho!
ResponderEliminarBesotes!!!
Yo recién he terminado Con el agua al cuello, de Petros Márkaris. 5º volumen de la saga del Comisario Jaritos. Saga que recomiendo, Márkaris sabe contar de forma magistral. Muy en la linea de Bevilacqua y Chamorro, Jaritos es un comisario ateniense muy afable y al que se le coge cariño desde el minuto uno. Disfrutar de la prosa de Márkaris te hace parecer que estás en la propia Atenas. Ahora estoy en las primeras páginas de La deshonra de Sarah Ikker, de Yasmina Khadra.
ResponderEliminarPues coincido en gran parte contigo. No llego ni mucho menos a tu nivel de lectura pero, en gran parte gracias a tus recomendaciones, he mejorado mucho últimamente mucho mi nivel de lectura, más que nada porque con tus recomendaciones, acabo todos los libros que empiezo cuando antes muchos acababan abandonados. En lo que va de año llevo leídos 16 libros y cuando empezó el confinamiento me las prometía muy felices, pero es cierto que aunque no he dejado de leer una grandísima novela como "El lado norte del corazón" me está costando terminarla, aunque hoy se termina, más de lo que me hubiera costado en otro momento.¿Nerviosismo, preocupación, ansiedad? No lo se, pero es cierto que me está ocurriendo
ResponderEliminarAy, Pedro, creo que a muchos nos pasado lo mismo. Pensábamos que nos distraeríamos del confinamiento leyendo muchísimo y la cabeza se nos va a otro sitio, preocupados, es normal. Parece que esta semana estoy leyendo algo más, pero porque me acompañan amigos. Un abrazo grande, me alegro de que estés bien.
ResponderEliminarMe encanta leer me está costando muchísimo. De un día para otro he pasado a trabajar en casa, la primera semana jornadas interminables, porque no funcionaba nada y había que improvisar, a lo que hay que sumarle la preocupación por lo que sucede, por la familia, así que ahora que intento tener horarios racionales no me concentro. Espero que a medida que vayan mejorando las perspectivas también lo haga la concentración
ResponderEliminarMucho ánimo y que sigáis todos bien.
Hola Pedro!!!! Para mí tampoco está siendo mi mejor época lectora. No sé si habrás visto que en mi muro estoy compartiendo muchísimos libros gratis que están regalando autores y editoriales para este mes... Más la inmensa lista pendiente que tenía de las editoriales... Qué cuando todo esto se arregle nos van a llover los libros y verás que agobio jajaja. A lo que iba, con una niña de 3 años todo el día encerrada en casa con berrinches brutales día sí, día no, inventando mil cosas para que se entretenga y momentos de agobio, incertidumbre y ansiedad (hace un rato me he tomado medio diazepán...). Pues cuando acaba el día que es cuando puedo leer mi mente y mi cabeza no dan para más... Aún así saco alguna reseña, bastante mediocres ahora por cierto, y estoy acabando libros, pero la verdad es que los estoy disfrutando poco y me dan tanta rabia... En fín, ya veo que esto nos está pasando a todos, y es que es normal que nos pase factura. Besos y ánimos a todxs
ResponderEliminarHola!!! Pues a mí me pasa lo mismo que a ti. Creí que iba a bajar un montón la lista de lecturas pendientes pero no hay manera. Me distraigo con cualquier cosa y no puedo concentrarme. Leo dos líneas y se me va la mente a todo lo que está sucediendo en estos momentos y al móvil que no para de sonar o bien con mensajes o con llamadas de familia y amigos que quieren saber cómo estoy y yo cómo están ellos. Así que me lo estoy tomando con calma porque no quiero agobiarme y el rato que lea, quiero disfrutar. Mucho ánimo y fuerza!!! Gracias por el post
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