La fragilidad del crisantemo
José Vicente Alfaro
Título: La fragilidad del crisantemo
Autor: José Vicente Alfaro
Editorial:
Martínez Roca, 2019
Encuadernación:
Tapa blanda
Páginas: 355
Esto es lo que la editorial nos cuenta
del autor:
José Vicente Alfaro (Huelva,
1976), licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla. Su novela La
esperanza del Tíbet (2013) permaneció casi dos años en el Top
100 de Amazon, con miles de ejemplares vendidos. Luego publicó El
llanto de la Isla de Pascua, El último anasazi y Bajo
el cielo de los celtas. Sus obras han sido traducidas a distintas
lenguas.
Estas son las novelas del autor de las
que puedes encontrar reseña en este blog:
ARGUMENTO de
LA FRAGILIDAD DEL CRISANTEMO
Estas es la historia de tres personas de
muy diferente condición social en el Japón del siglo IX: Asatori de origen
campesino y que aspira convertirse en monje guerrero, Katsumi, una dama de la
alta nobleza con un exquisito gusto para las letras y Tokinobu, miembro de la
Guardia Ciudadana, cuya carrera en la misma se ve limitada no por su capacidad
sino por no tener una ascendencia noble.
Tres vidas que aparentemente nada tienen
en común pero que acabarán entremezcladas en una historia de amor e intriga.
LA
FRAGILIDAD DEL CRISANTEMO
Tras varias novelas autopublicadas con
notable éxito (seis o siete), José Vicente Alfaro acaba de ser publicado por una
editorial. Lo hace con La fragilidad del crisantemo, en la que
vuelve a ofrecernos una novela de corte histórico que nos llevará a otra
civilización y a otra cultura, algo que le gusta mucho hacer, pues de su mano a
través de sus novelas hemos podido visitar el lejano Tíbet (La esperanza del Tíbet), la
construcción de las colosales estatuas de la isla de Pascua (El llanto de la
isla de Pascua), la cultura de los primitivos pueblos americanos (El último anasazi), la
civilización minoica anterior a la civilización griega en la legendaria Creta (El sueño de Creta) o las
primitivas tribus celtas (Bajo el cielo de los celtas)
En este caso viajaremos de su mano al
Japón del siglo IX después de Cristo, para mostrarnos una sociedad y una
cultura muy diferentes a la nuestra, a través de la historia de tres
personajes. Conoceremos así un Japón en el que las creencias en numerosos
dioses y diablos condicionan su vida diaria. Así la desaparición de niños se
achaca sin duda a la actuación de unos diablos que actúan en el bosque.
Una sociedad en el que la nobleza se
rige por complicadas normas, así como el cortejo amoroso, pues lo más
importante es la capacidad de escribir bellos y delicados poemas, la pulcritud
de su complicada escritura, la capacidad de combinar los colores en sus prendas
o la elaboración de perfumes. Una manera muy fina y elegante de excluir de su
círculo a aquellos que no pueden alcanzar dicha cultura y formación.
Espada japonesa de la época |
A ese mundo pertenece Katsumi, que todavía sigue soltera pues no ha conseguido
encontrar ningún hombre que sea de su agrado, mientras se refugia en su
escritura. No solo escribe bellos poemas, sino que está escribiendo la historia
de un príncipe.
A ese mundo intenta acercarse Tokinobu, un oficial de la Guardia Ciudadana, un rango
inferior al ejército, pero cuya carrera ha tocado techo porque su origen le
impide seguir escalando puestos en su carrera. Salvo que consiga casarse con
alguien de la nobleza, algo que se hace muy difícil por su torpeza en la
escritura, imprescindible en las primeras fases del complejo cortejo amoroso.
Pese a todo, no se desanima, pues cuenta con la ayuda de su gran amigo, uno de
los más importantes nobles de la corte.
Muy alejado de todos ellos se encuentra Asatori, un joven campesino que siendo un niño desapareció
durante un año. Todos piensan que raptado por los diablos. Él no consigue
recordar nada de ese periodo de su vida que le ha dejado marcado para siempre,
pues en su pueblo es rechazado sistemáticamente como si fuese capaz de
contagiarles su desgracia, hasta que un día decide salir del pueblo y
convertirse en un monje guerrero
Es a través de sus historias como iremos
conociendo la historia y las costumbres de ese pueblo japonés, en lo que
finalmente termina siendo una novela con mucha más acción de la que parecía al
principio y en la que también podremos encontrar una bella historia de amor.
Todo ello urdido en una trama que tiene
hasta su toque de novela negra o de intriga, porque a Katsumi la terminan
encargando que investigue esa desaparición de niños. Porque una cosa es que
desaparezcan hijos de los campesinos (que casi ni personas son considerados) y
otra muy distinta que quien haya desaparecido sea una niña destinada a
convertirse en la mujer de un príncipe. Sorprendente este toque de novela negra
que le da mucha viveza a la historia.
OPINIÓN
PERSONAL
Foto de El Búho entre libros en Instagram |
Creo que con La fragilidad del
crisantemo ha conseguido José Vicente Alfaro su mejor novela. Hablo con un
cierto conocimiento de ello, pues he leído con ésta cinco de sus novelas.
Vaya por delante que no soy un enamorado
de la cultura japonesa, tal vez porque su modo de ser tan diferente me hace
complejo el poder empatizar con sus protagonistas o entender un modo de ser
completamente diferente y alejado de nuestras costumbres.
Sin embargo, en La fragilidad del
crisantemo
consigue José Vicente
Alfaro crear
tres personajes a través de los cuales es muy fácil adentrase en ese peculiar
mundo a través de unas páginas iniciales en las que, aunque el ritmo sea algo
más lento que el resto de la novela, se compensa con creces con el hecho de
meterte de lleno en ella.
A partir de esas primeras cincuenta
páginas, la novela va ganando en ritmo a medida que el autor va introduciendo
elementos como una historia de amor, la formación de un monje guerrero o la
guerra contra un pueblo enemigo al que debe acudir uno de los protagonistas.
Sumadle a eso que también nos veremos
envueltos en una intriga muy de novela negra (cuántas buenas novelas negras se
han escrito a partir del argumento de desaparición de niños) que aún le da más
ritmo y variedad a la novela.
Por tener, tiene hasta su toque de
metaliteratura, no solo por la aparición a lo largo de la novela de versos
japoneses, sino porque la protagonista está escribiendo una novela, casi diría
que por capítulos. Una novela que no era desde luego el género de la época,
pero que comenzó a triunfar en aquellos siglos en Japón.
Crisantemo |
Hay además todo un homenaje
literario a una gran novela, cuyo nombre no voy a decir para no destripar el final de la novela. Cuando leáis la
novela me lo decís.
Resumiendo, José Vicente Alfaro consigue con La fragilidad del crisantemo una novela que
se lee con creciente interés hasta que es imposible dejar su lectura gracias a
su hábil combinación de una sociedad diferente y lejana, unos hechos históricos
muy interesantes, un toque de novela negra, una acción cada vez más rápida, una
gran historia de amor y unos personajes difíciles de olvidar (otra cosa
diferente es conseguir retener sus nombres)
Una buena oportunidad para conocer a un
gran autor que, aunque desconocido por la mayoría de vosotros, cuenta ya con
una dilatada experiencia como escritor.
VALORACIÓN: 8/10
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Tiene muy buena pinta esta novela. Y la ambientación japonesa es un punto muy a su favor. Terminará cayendo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Tampoco me apasiona la cultura japonesa y, sin embargo, el libro me ha gustado mucho. He aprendido un montón y me he entretenido
ResponderEliminarGracias por participar en la lectura conjunta