CUARTO ANIVERSARIO DE EL BÚHO ENTRE LIBROS

El pasado lunes día 24 fue el cuarto aniversario de este blog. Los cumpleaños son un buen momento para mirar atrás, porque siempre es bueno ver de dónde vienes, para tomar impulso hacia delante. Y eso es lo que voy a hacer con esta entrada, en la que aprovecho ya que me pongo, para hacer unas cuantas reflexiones sobre este apasionante mundo de los blogs y en concreto sobre el que se dedica a la literatura.

Hace unos días mi hija Teresa de Leyendo en el bus, hizo una reflexión sobre el placer o no placer de escribir reseñas que tituló "El valor de los blogs literarios y las reseñas" (pincha AQUÍ si quieres leerla) y cómo había decidido cambiar a una línea un tanto diferente; Y en el fondo, lo que iba a hacer era contar aquello que las novelas que reseñara le habían hecho sentir al leerlas.

Una opción muy válida. De hecho a mí me encanta cómo hace ese tipo de reseñas. Podemos reseñar los dos un mismo libro sin que nuestras reseñas tengan el mínimo parecido.

Fue todo un éxito de entrada con multitud de comentarios, entre los que se hablaba de los visitantes silenciosos. Creo que mi blog va camino de ello, porque la proporción entre número de visitas a una entrada y número de comentarios, va decantándose cada vez más del lado del número de visitas, en constante aumento, en detrimento de un número cada vez menor de comentarios en el blog.

Creo que es normal, porque mi interacción con otros blogs no es muy alta. Ni son muchos los que visito (en comparación con los todos los que hay), ni son habituales mis comentarios, que en caso de haberlos, suelen además ser breves.

Mi rincón de trabajo

Otro tema que surgió en dicha entrada fue el tamaño de las reseñas. Soy consciente de que muchos de los que me visitan probablemente salten directamente hasta el apartado final, aquel en el que pongo IMPRESIÓN PERSONAL. De ahí, que he decidido mimar justamente ese apartado, que normalmente no suele ser largo, en torno como mucho a las doscientas palabras aunque en algún caso como la de ayer en Falcó se me disparara a las cuatrocientas.

No quiero cambiar. Las reseñas en primer lugar son para mí, son mi memoria privada, mi peculiar manera de reflexionar y asentar un libro. Si además forman parte de una serie, son el sistema que utilizo para refrescar mi memoria antes de leer el siguiente de la misma.

Reseñas normalmente construidas en torno a citas del propio libro que voy marcando a medida que leo con post-it que no lo estropean y que me permiten reflejar exactamente lo que el autor nos cuenta a propósito de un personaje o hecho de la novela.

En este año he llevado a cabo importantes cambios en el blog, aunque afectan más al fondo que a la forma. Antes de preparar esta entrada, he visto que en la del tercer aniversario ya decía que iba a cambiar la estética del  blog. Algo para lo que me puse en manos de una profesional (por otra parte tampoco es algo que salga muy caro) y he quedado muy contento con el resultado.

Búho calendario

Es un intento de dar una apariencia más profesional al blog, porque si bien es verdad que no cobro un duro por este trabajo (ya me gustaría a mí poder tener unos ingresos por él y dedicarle más tiempo como si realmente fuera un trabajo), no es menos cierto que cada vez es mayor el número de visitantes y de seguimiento del blog por parte de editoriales y de autores, que ante todo, además del contenido, buscan un continente más atractivo donde ver el mensaje sobre sus libros publicitado.

Porque no se trata de otra cosa. Nuestras reseñas no dejan de ser publicidad (incluso cuando hablamos mal) para las editoriales y los autores, que ven en este mundo un sistema más económico y eficaz de poder llegar a los lectores.

Os puedo asegurar que la relación con editoriales y autores me tiene cada día más desbordado (no es una queja ni mucho menos), hasta el punto de que no puedo coger todo lo que me ofrecen ni por supuesto leer a todos aquellos autores que se acercan a mí con la intención de que les reseñe un libro. No me da el tiempo para tanto y teniendo en cuenta que no es un trabajo por el que perciba dinero, tampoco es cuestión de abandonar todo lo demás.

En esta línea de cambio del blog, puede incluirse también la creación de una cuenta en twitter, un modo muy eficaz de promocionar el blog, de estar al tanto de novedades editoriales e interaccionar con blogueros, autores y lectores, y que en menos de un año ha superado ya los mil seguidores, una cifra que ya sé que está muy por debajo de blogs que llevan más tiempo en ese mundillo, pero esto no es una competición.

Imagen inicial de El Búho entre libros

No quiero enrollarme más, que aquí no podéis saltar a lo de impresión personal. Solo quiero dar las gracias a todos los que me apoyáis día a día con vuestras visitas, aunque sea sin comentarios. Mañana os presentaré el sorteo que tengo por este cuarto aniversario.

¿Y el futuro? Animarme de una vez por todas a dar otro salto, algo que llevo tiempo pensando pero que el miedo a un medio distinto como es el de editar un vídeo me tiene parado. Sí, mi intención, que no es una promesa es crear un canal de youtube. Bueno, más que crear, que creado ya está, llenar de contenido y darle continuidad.

Y con estas me despido hasta el año que viene, que espero seguiros teniendo por aquí. Bueno, eso del año que viene pilla muy lejos. Mejor hasta la próxima entrada, que tardará mucho menos.