ÁNGELES DE GRANITO (ESTEBAN NAVARRO)

Ángeles de granito

Esteban Navarro

 

FICHA TÉCNICA

Título: Ángeles de granito

Autor: Esteban Navarro

Editorial: Autoeditado

Páginas: 252

PVP: 3,99 €

ESTEBAN NAVARRO

Se considera a Esteban Navarro como el creador del término generación kindle. A él le permitió, después de haber sido durante mucho tiempo uno de los autores que más vendió en esa plataforma, ser fichado por una editorial y poder ver publicados algunos de sus libros en papel.

El currículum literario de Esteban Navarro está repleto de premios, de los que voy a destacar dos:

-Certamen de Novela Saramago La balsa de piedra 2001 (por El buen padre)

-Finalista Premio Nadal 2013 (por La noche de los peones)

ARGUMENTO de ÁNGELES DE GRANITO

«”La peste de los huesos”, dijo doña Sancha, refiriéndose a la enfermedad desconocida del pequeño Martín. “Es la peste de los hueso”». Y los médicos adoptaron el nombre y en un par de meses vieron un reportaje en la televisión hablando de tan extraña alteración, utilizando el nombre con que la bautizó la anciana».

Martín parece un niño normal, hasta que un día jugando sus huesos se quiebran. Lo que parecía una simple rotura termina siendo una compleja enfermedad, una osteoporosis que no solo convierte en muy quebradizos los huesos de Martín, sino que hacen que su vida sea un continuo dolor. Un dolor que por otra parte no va a prolongarse mucho pues el niño no podrá vivir muchos años.

Dsesesperada, su familia decide acudir al Santuario de Nuestra Señora de Mesina, donde espera que la Virgen, con fama de muy milagrera, sane a su hijo.

No son una familia con recursos, por lo que es una apuesta que pone en riesgo la subsistencia familiar, pese a lo cual acuden al pueblo más próximo al santuario para alojarse en una de las casas de granito que allí hay, donde conocen al viejo propietario de una de ellas que los acoge en la misma.

La casa es muy especial, llena de pinturas de ángeles y demonios, que no tardarán en afectar seriamente a Luis, el padre de Martín.

ÁNGELES DE GRANITO

Ángeles de granito es una novela inclasificable, porque lo que arranca como una novela costumbrista de una España oscura en la época franquista, termina derivando a una novela casi de terror y misterio, para seguir luego como una novela con un toque de misterio e intriga.

En el centro de la novela la enfermedad. Aquello de tres cosas hay en la vida: salud, dinero y amor, para la familia de Martín se limita al amor, porque salud ninguna y dinero muy poco. Y una enfermedad es algo que trastoca la vida del que la padece y de todos los que le rodean:

«Había estudiado en el instituto y sabía que las enfermedades no son solamente palabras, sino que son algo más, que se corresponden con acontecimientos, que son formas de nombrar a la desesperación.»

Hay enfermedades muy difíciles de asumir, no solo para el que las padece, sino para aquellos que están con él, pues escapan al control humano, pero sobre todo a la comprensión. El ¿por qué a él? puede convertirse en un auténtico suplicio para sus seres queridos:

«Martín se moría. La peste de los huesos ganaba terreno, lenta pero inexorablemente, y devoraba cada una de las articulaciones del hijo de los Heredia. Y Juana se planteaba si la enfermedad de su hijo no era un castigo por algo que hizo o por algo que no debió hacer».

Uriel

Pero este arranque va virando, con la llegada de la familia a la casa, a una novela de terror, en la que la presencia y la lucha entre el bien y el mal se hacen muy presentes, en una casa en la que la presencia de ellos parece ir mucho más allá de las pinturas en las que se les representa y que pueblan toda la casa

«Seis demonios y seis ángeles. Parecía que hubieran posado para ser pintados. Kazbeel, el mentiroso. Makkiel, la plaga. Pariel, el despiadado. Zafiel, el espía. Asbeel, el desertor. Chitriel, el azote. Frente a ellos, los seis ángeles. Araziel, el músico. Camael, el visionario. Chamuel, el que busca. Gabriel, el gobernador del cielo. Rafael, el resplandor. Uriel, la fuerza. Luis pensó que el dueño de la casa era un fanático de esos espíritus».

Parecen haber llegado a algún lugar muy singular, donde se les hacen patentes todas sus dudas, incluida la auténtica razón por la que hasta allí han viajado:

«En esa dimensión compacta donde los ángeles y los demonios comparten terreno, era el mejor lugar para que sus preguntas obtuvieran respuesta ya que los Heredia habían viajado hasta allí no solo a salvar la vida de su hijo, sino a obtener respuestas».

Esto es sin duda lo mejor de la novela, esa ambientación tan peculiar que Esteban Navarro sabe darle a la novela, creando una atmósfera fantasmagórica en una casa que poco a poco parece irse adueñando de los que en ella viven, un lugar en el que las fuerzas del bien y el mal parecen librar una dura batalla:

«Por la cabeza de Luis y de Juana pasaron los momentos que les empujaron a llegar allí, a ese sitio extraño y alejado del mundo, a ese lugar donde se entremezclaban los ángeles y los demonios y cohabitaban en herméticas casas de granito las fuerzas que formaron la tierra».

IMPRESIÓN PERSONAL

En esta ocasión Esteban Navarro se ha alejado de su habitual línea negra para adentrarse por otros caminos. Y aunque me duela decirlo, creo que se ha perdido un tanto. O a lo mejor el que me he perdido he sido yo, porque no conseguí pillarle el punto a esta novela, que consiguió desconcertarme totalmente.

Me encantó su comienzo y ese clima de novela de fantasmas y demonios que nos propone el autor durante el primer tercio o más de la novela. Pero a partir de ahí comenzó con una serie de giros que terminan llevando la novela a un terreno impreciso en el que los personajes quedan completamente diluidos junto a la novela, en el que (y no quiero ser más preciso para no destripar la novela a los que queréis leerla), el universo de demonios y terror que parecen impregnar cada página de la novela dan paso a una simple intriga sin más que además según avanzaba y se unían nuevos y bruscos giros en la trama, me parecía cada vez más inverosímil.

Me daba la impresión de estar asistiendo a numerosas discordancias, algo que puede ser solo cuestión mía, a lo que sin duda también contribuye el que el autor obliga a andar haciendo cálculos al lector para saber en qué momento histórico se encuentra la trama, pues si bien por una parte no se habla de años concretos, por otra se dan fechas precisas como el de la guerra civil, que terminan por no cuadrarme con algunas edades de los protagonistas o con circunstancias que no parecen propias de la época en la que parecen estar.

Una pena, porque el principio de la novela prometía una línea que a mí me pareció muy sugerente, que se va diluyendo al avanzar la trama. Además, esa sensación de que algo no cuadra, aumenta conforme han pasado unos días de haberla leído.

Lo siento, Esteban, espero resarcirme con alguna otra novela tuya, porque ésta no me ha convencido. ¿Cosa mía? Probablemente, porque esta novela ha sido finalista en el X Premio de novela Ciudad de Badazjoz y en el IV Premio Ciudad de Almería.

VALORACIÓN: 5/10

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