La viuda
Fiona Barton
FICHA
TÉCNICA
Título: La
viuda
Autor: Fiona
Barton
Editorial: Planeta, 2016
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 520
Editorial: Planeta, 2017
Encuadernación: Tapa blanda, bolsillo
Páginas: 529
PVP: 9,95 €
FIONA BARTON
Fiona
Barton cuenta con una
dilatada carrera en el mundo del periodismo, ex redactora de sucesos del Daily Telegraphy y ha trabajado en muchos juicios,
incluyendo la desaparición de Madeline McCann. Fue galardonada con el
prestigioso Premio Nacional de la Prensa británica.
La viuda es su primera novela.
ARGUMENTO de LA VIUDA
Pocas cosas puede haber tan angustiosas
como la llamada de una madre a la policía diciendo: Se la han llevado. Bella
Elliot es una niña de dos años que ha desaparecido del jardín de su casa
mientras su madre estaba dentro haciendo las tareas del hogar.
No hay pistas por más que la policía
intenta averiguar quién se la ha podido llevar, ni por más que la prensa
sensacionalista convierta este caso en su centro de atención.
Poco a poco, algunas pistas comienzan a
conducir los focos hacia Glenn Taylor, un hombre que trabaja de repartidor tras
ser despedido de su trabajo en un banco.
¿Cómo es en realidad Glenn Taylor, un
hombre apacible y en apariencia amante esposo? ¿Qué verdades se encierran en el
interior de su hogar, ese hogar que tan celosamente defiende su esposa Jean?
Una periodista y un policía buscan esa
verdad para dar con el paradero de la pequeña niña.
LA VIUDA
Sobre secuestros o desapariciones de
niños pequeños se han escrito unos cuantos libros. Sin embargo La viuda es
totalmente original, porque va mucho más allá de la desaparición de una niña o
de la intriga por si aparecerá o no, si se encontrará o no al culpable, para
llevarnos al interior de un matrimonio, para hacernos pensar hasta qué punto
conocemos a nuestra pareja, porque como nos cuenta la propaganda de la novela,
la esposa se pregunta:
«Si él hubiera hecho algo horrible, ella lo sabría. ¿O no?»
La novela arranca en un tiempo posterior
al propio secuestro, casi cuatro años después, cuando una periodista se acerca
a la casa de la mujer del presunto culpable. Una mujer que ahora es viuda pues
su marido ha muerto en un accidente, llevándose con él el secreto de su posible
culpabilidad y del paradero de la niña:
«Puedo oír el ruido que hace la mujer al recorrer el sendero. Sus pasos son pesados y lleva zapatos de tacón. Ya casi ha llegado a la puerta, y vacila y se aparta el pelo de la cara. Va bien vestida. Chaqueta de botones grandes, un respetable vestido debajo y las gafas sobre la cabeza. No es un testigo de Jehová ni un miembro del Partido Laborista. Debe de ser periodista, pero no parece la típica reportera. Hoy ya se han presentados dos (cuatro esta semana y solo estamos a miércoles). Apuesto a que me dice: «Lamento molestarla en unos momentos tan difíciles». Todos lo hacen y ponen esa estúpida cara. Como si les importara…»
Tres serán las voces narrativas que nos
harán avanzar en la historia: la de la viuda, la de la periodista y la del
policía que investiga el caso. Bueno, en realidad son cinco, porque la del
marido y la de la madre de la niña se nos presentan de un modo secundario en
alguna ocasión.
La única voz que se nos presenta en
primera persona es la de Jean Taylor, la viuda, que es además el personaje que más evolución
presenta a lo largo de la novela. Una mujer con poca cultura que en su día se
dejó deslumbrar y enamorar por un hombre que aparentaba ser un fenomenal
partido, mayor que ella, con dinero, cultura y posición, aunque como descubrirá
ella, con algunas “manías” que la llevan a convertirse en una excelente ama de
casa con todo impoluto para él. Para su desgracia, o según él no porque así se
tendrán el uno al otro, no podrán tener hijos porque él resulta ser estéril.
Cuando su marido es acusado del
secuestro de la niña, ella no puede en ningún momento creer en la posible
implicación de él en semejante disparate, pero poco a poco la duda irá entrando
en su interior. ¿Qué son esas “tonterías” que hace en la sala de invitados con
el ordenador? ¿Conoce realmente al hombre que se ha casado con ella?
Muy bien dibujada está también el
personaje de Kate Waters, la periodista
que logra acercarse hasta la viuda para intentar sacar de su interior esa
verdad que tal vez ni ella misma sepa que tiene. Un personaje en el que muy
bien podría verse la propia imagen de la autora por más que ella diga que es en
realidad un personaje construido a partir de muchos de los periodistas que ella
conoce.
Porque Fiona Barton es una periodista
curtida en muchos juicios, que también en su día siguió el mediático caso de la
desaparición de Madelaine. En la carta de presentación que aparece en La viuda,
ella misma nos dice:
«A lo largo de los años, he entrevistado a víctimas, culpables, famosos y gente corriente afectada por la tragedia o la buena fortuna. Curiosamente, sin embargo, no siempre ha sido la gente bajo los focos la que más me ha llamado al atención. Con frecuencia, han sido más bien las personas que estaban en la periferia, los actores secundarios del drama, quienes me han seguido obsesionando».
Eso es justamente la novela: el punto de
vista del personaje secundario, del que tiene que apoyar al presunto culpable,
al que está directamente bajo los focos. Y es en ese personaje aparentemente
secundario en el que se fija Kate Wanters, la periodista y entrevistadora de
esta novela.
Steve, su marido, define del siguiente
modo el talento de Kate:
«-Se acerca cada vez más a la presa alimentándola con pequeñas muestras de amabilidad y humor, una mención de dinero futuro, la posibilidad de ofrecer su versión de la historia, hasta que la tiene comiendo en la palma de su mano».
Y eso es lo que hará, de un modo
implacable con Jean Taylor, primero esposa y luego viuda. Al igual que en su
día hizo con Dawn Elliot, la madre de la niña desaparecida.
La tercera voz es la de Bob Sparkers, el
policía que vive obsesionado con encontrar a la niña desaparecida. Una
investigación en la que cuenta en parte con la colaboración de la periodista, con la que le une una vieja
amistad.
Un personaje al que alguien le define
como:
«Es un policía integro de la cabeza a los pies. Uno de los últimos».
IMPRESIÓN
PERSONAL
Es peligroso leer una novela con las
expectativas muy altas. Y lo cierto es que con La viuda las tenía,
porque desde hace tiempo ya venían hablando con mucho entusiasmo (y eso es algo
difícil de fingir cuando vas conociendo al personal) de esta novela, que
consideran que puede ser el libro del año.
Y lo mejor que se puede decir de una
novela cuando vas con expectativas tan altas es que no te ha defraudado. Ese es
mi caso, La viuda no me ha defraudado. Es una novela que sin duda gustará a
todo tipo de público, porque aunque en principio pueda inscribirse en el
llamado género negro, tiene componentes de muchos otros géneros que sin duda
harán que pueda llegar a cualquier tipo de lector.
De entrada, está dentro de la variante
más ligera de la novela negra, sin baños de sangre, más próxima a lo que ha dado
en llamarse “domestic noir” aunque tampoco esté totalmente dentro de ese
género, porque si bien trata de los entresijos, las intimidades y los secretos
de un matrimonio, es un policía el que investiga el caso.
Se acerca también a lo que se ha dado en
llamar thriller psicológico, pues lo que hace es ir entrando en la psicología
de los personajes, en descubrir los mecanismos de su mente, aquellos que les
llevan a comportarse como lo hacen.
A pesar de saber que la autora es una
periodista que lleva toda la vida escribiendo, no deja de sorprender en esta
novela que se un primer libro, porque está muy bien estructurado, a pesar de la
complejidad que puede suponer el uso de tres voces.
Muy acertado el desarrollo de los personajes,
en especial el de la esposa, esa mujer sencilla que empieza a comprender que su
matrimonio no es lo que ella creía, que su marido puede no ser esa persona con
la que creyó casarse, por lo que tendrá que tomar la decisión de callar o
mentir. Una decisión que la hará madurar como persona.
Presentación de La viuda |
No es La viuda una novela en la
que la autora nos lleve de giro en giro, sorprendiéndonos constantemente. No se
trata de eso, sino más bien la de avanzar con los personajes, ver su evolución,
las decisiones, acertadas o no que van tomando por el camino y llegar a un
final que, evidentemente no puede ser demasiado sorpresivo, porque para serlo,
la autora tendría que haber hecho demasiadas trampas por el camino engañando el
lector para dar una final que no es el que finalmente podemos leer.
Sin embargo, esa cierta previsibilidad,
no resta ningún interés a la novela, que en todo momento sabe mantener la
intriga y la tensión-
En resumen, una novela muy actual en la
que se revisa el papel de la prensa y los medios de comunicación en la “explotación”
y “creación” de noticias, con unos escenarios muy bien descritos y con una
galería de personajes que mantiene la credibilidad y verosimilitud de la trama.
Gracias a Editorial Planeta que me ha
facilitado un ejemplar de La viuda para su lectura y reseña.
VALORACIÓN: 8/10
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¿Ya la has leído? ¡Qué velocidad! Veo que las expectativas te han llevado a una opinión menos entusiasta de la que habrías tenido si nadie dijera que es la novela del año. Yo no sé si la leeré; llamarme me llama la atención, pero tengo tanto pendiente...
ResponderEliminarUn abrazote.
Deseando hacerme con ella y leerla. Sólo con la portada y el título ya me llamaba :)
ResponderEliminarBs.
Habrás que leerla, pero sin pasarse con las expectativas.
ResponderEliminarUn beso ;)
Vas en cabecera con todas las reseñas! No sé cómo lo haces para leer tan pronto las novedades. Este me apetece mucho. A ver si puedo leerlo un poco más adelante.
ResponderEliminarBesos
La voy a leer pronto así que ya compararemos opiniones.
ResponderEliminarBesos.
Lo tengo apuntadísimo =)
ResponderEliminarBesotes
A mi no me ha entusiasmado, al principio me enganchó, pero después se me hizo muy pesada y repetitiva.
ResponderEliminarLa próxima.
ResponderEliminarMe ha resultado lenta, pesada y aburrida.
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