Hombres desnudos
Alicia Giménez Bartlett
FICHA TÉCNICA
Título: Hombres desnudos
Autor: Alicia
Giménez Bartlett
Editorial: Planeta, 2015
Encuadernación: Tapa dura
Páginas: 474
PVP: 21,90 €Ebook: 12,34 €
Editorial: Planeta, 2016
Encuadernación: Tapa BLANDA BOLSILLO
Páginas: 480
PVP: 9,95 €
De
ella nos cuenta le editorial en la solapa interior:
Alicia
Giménez Bartlett nació en Almansa (Albacete) en 1951. Estudia
Filología Española en la Universidad de Valencia y se doctora en
Literatura Española por la Universidad de Barcelona con una tesis
titulada La narrativa de Gonzalo Torrente Ballester.
Em
1984 publicó su primera novela, Exit (Seix Barral). Con Una
habitación ajena (1997) obtuvo el primer galardón literario de
su carrera: el Premio Femenino Lumen
En
los años noventa crea el personaje de Petra Delicado, la
popular inspectora que ha dado pie, hasta ahora, a nueve obras de la
saga y a una serie de televisión. Estas han sido traducidas a
diversos idiomas, y gozan de gran éxito en países como Italia o
Alemania. Ha recibido los prestigiosos premios Grinzane Cavour en
Italia y Raymond Chandler en Suiza.
También
ha cultivado el ensayo con obras como El misterio de los sexos
y La deuda de Eva. En 2011 obtuvo el Premio Nadal por su obra
Donde nadie te encuentre.
Almas
al desnudo
ARGUMENTO
Javier
es profesor de literatura en un colegio, donde deciden prescindir de
sus servicios por los recortes en el presupuesto.
Irene
es una rica empresaria cuya empresa, heredada de su padre está
pasando un delicado momento. Su vida no marcha mejor, pues su marido
decide abandonarla por una mujer más joven.
Dos
vidas muy diferentes, ambas en crisis, pero que terminarán
cruzándose.
HOMBRES AL DESNUDO
Muchos
libros se ambientan en la guerra civil española. Y tiene su
explicación, pues es en las situaciones extremas (y cuál más
extrema que una guerra civil) donde las pasiones relucen con más
fuerza, donde sale lo mejor y lo peor de los indivíduos.
Y
volvemos a estar en guerra. Una guerra no declarada, en la que no se
utilizan armas, pero en la que se está destruyendo al vida de muchas
personas. Eso y no otra cosa es la crisis en la que está sumergida
nuestra sociedad.
Por
eso, comienzan a aparecer novelas en la que la crisis no es el
paisaje de fondo en el que se mueve la trama. Al contrario, la
crisis es el eje central de la misma. Podemos encontrar
así Los besos en el pan de
Almudena Grandes,la novela
coral de la crisis y, anterior a ella, Lo
que encontré bajo el sofá de Eloy
Moreno, un retrato de la crisis a través de la vida de
los vecinos de Toledo, o la divertidísima Masaje
para un cabrón de Ana
Cañil, con las aventuras y desventuras de un ama de casa
de Fuenlabrada (Madrid) lanzada a buscarse la vida por culpa de la
crisis.
La
crisis va desmantelando vidas a su paso, poniéndolas patas arriba,
haciendo realidad las peores pesadillas de muchas familias. A grandes
males, grandes remedios. O no. Pero las vidas de muchas personas se
han visto obligadas a cambiar y a tomar derroteros nuevos, una
aventura que muchos no se han planteado nunca y de la que no siempre
pueden salir bien.
La
peculiaridad de Hombres al desnudo
es que no tiene un narrador, sino tantos como personajes intervienen
en la novela, porque mezclado con los diálogos y la acción,
entraremos en la mente de los protagonistas para saber qué piensan y
qué sienten en cada momento. No son muchos personajes, pero están
tan bien dibujados que en todo momento sabemos quién es el narrador:
Irene (la empresaria), Javier (el profesor en paro), Clara (la
compañera de Javier), Iván (un hombre con un peculiar trabajo que
traba amistad con Javier) y Genoveva (antigua amiga de Irene y
también divorciada)
Aunque
todos comparten protagonismo, no todos tienen la misma importancia.
En principio la pareja principal son Javier e Irene.
Javier
es un profesor de literatura, o para ser exactos, que da clases de
refuerzo en literatura, de ahí que su puesto de trabajo sea
considerado fácil de suprimir. A fin de cuentas, la literatura es
una asignatura peligrosa:
La
literatura está llena de peligros. En cada verso de un poema, en
cada capítulo de una novela, en cada acto de una comedia o tragedia
hay un riesgo moral que, si trabajara para
el Opus, deberían neutralizar. (Página 83)
Javier
es cualquier cosa menos perfecto. Su personaje puede inspirar
lástima, aunque por otra parte, buena parte de lo que le pasa no
deja de ser consecuencia de su actitud ante la vida.
La
vida va pasando sin que nos hagamos preguntas a nosotros mismos. No
conviene, a lo mejor no nos gustan
las respuestas. La apariencia es suficiente: soy licenciado, tengo un
trabajo. Todo está bien. Por debajo, a muchos metros de profundidad,
laten las verdades. Allí las hemos
enterrado para seguir adelante. (Página 125)
Ha
buscado una vida sin conflictos, con tiempo libre para poder ejercer
su gran pasión: la lectura, una vida en la que no tenga que ponerse
a prueba, de ahí que no haya querido hacer oposiciones.
No
busqué un trabajo mejor porque soy perezoso y quería tener tiempo
libre para leer, mi gran pasión. (…) Me conformo con poco y he
intentado considerar eso somo una virtud, cuando en realidad es un
defecto. Nunca me he enfrentado a retos, ni idealistas ni materiales,
Soy muy poca cosa. (Página
126)
Una
vida que ha vivido en una especie de burbuja, lejos de la realidad.
Iván
está seguro de sí mismo y no se crea problemas morales que le
impidan decidir lo que le conviene. Su mundo ha resultado ser más
real que el mío. Mi ideal era una vida tranquila, un amor
comprensivo y sereno, un alud de libros que me aportarían felicidad.
Sin embargo, todo eso ha desembocado en un sueño de ficción que se
ha venido abajo con los primeros vientos en contra.
(Página 258)
Una
vida tal vez no elegida por él, sino por su falta de autoestima
Iván
es muy superior a mí. Yo soy un paria, un desclasado, un inútil.
Alguien a quién echan del trabajo y a quien su mujer le da tres días
para desaparecer. (Página 193)
Por
contraposición a Javier, tenemos el personaje de Iván,
el polo opuesto:
Es
sorprendente, este Iván.
No tiene un pelo de tonto. Todo lo que dice desprende una cierta
ironía divertida, refrescante, crítica al mismo tiempo. Debe ser
uno de esos gatos criados en la calle: listo, rápido, capaz de huir
del enemigo o de enfrentarse a él según lo requiera la ocasión.
(Página 42)
Tan
opuesto, que cuesta para los que no le conocen entender el cómo es
posible esa amistad, aunque la realidad es que Iván tiene algo que
Javier desea: libertad:
Era
tan cutre, y al mismo tiempo tan libre, que daba gusto oírlo hablar.
(Página 53)
Es
lo que él nunca ha sido capaz de ser: un superviviente, un auténtico
buscavidas:
Él
ha sabido buscarse la vida, espabilarse, convertir las duras
condiciones de su pasado en una realidad cómoda y sin traumas. Sale
a la calle, compite, da la cara (Página 193)
Un
hombre que no se corta en decir lo que piensa desde su experiencia de
vida.
Esto
de las redes es un comecocos que en el fondo me la suda. Tengo
colegas que andan muy colgados con el tema, pero yo no. Las cosas de
verdad pasan en la calle, y no en el ordenador. Pero a la gente nunca
le pasa nada porque están acojonados, esa es la verdad.
(Página 191)
Irene
es una hija de papá. Su madre murió siendo ella muy pequeña y ha
estado al cargo de su padre, del que ha heredado una empresa que se
ve ahora en apuros por culpa de la crisis. Su matrimonio con un
abogado que en el fondo la utilizó para crecer en la empresa se
acaba de ir por el desagüe cuando su marido le dice que no soporta
más un matrimonio de mentira y que se va con otra mujer:
En
el fondo no me sorprende que estuviera harto. Yo también lo estoy.
Harta de la crisis, de los impagados, de perseguir clientes, de la
negación de créditos bancarios. (Página 120)
Una
nueva vida se abre ante Irene, que acostumbrada a una vida (por muy
anodina que fuera) de pareja, siente que ya ni encaja con su grupo de
amigos, por lo que se pone en contacto con Genoveva,
la díscola del grupo, criticada por todos porque en su día fue ella
la que plantó a su marido para irse con un chaval mucho más joven a
vivir la vida.
Un
contacto que abrirá un mundo totalmente desconocido para Irene, el
de los hombres de compañía.
Es
este mundo de hombres de compañía,
junto al de los que se dedican a practicar bailes eróticos (con o
sin desnudo final) el que se nos mostrará en esta novela. Un full
monty a la española, solo que totalmente diferente. Un
mundo profesionalizado al que se ven abocados no tanto por gusto sino
por necesidad, algunos de los personajes de esta novela. Una vía de
escape a la crisis:
Si
pesas cien kilos y tienes michelines, el coco medio calvo y barrigón,
mejor te dedicas a otra cosa. Tener la picha pequeña da igual, si
hace falta te ponen un postizo. (Página 90)
No
deja de resultar curioso que, pese a que uno de los protagonistas sea
un profesor de literatura, Hombres desnudos no sea un libro en el que
la literatura desempeñe un papel importante. De hecho, el único
libro al que realmente se hace alusión es a Crimen y castigo de
Dostoiewski, que es el libro que Javier se empeña que lea Ivan y al
que se hacen algunos comentarios en la novela:
Curioso
¿verdad? Los problemas se acumulan en mi vida y lo que hago es
ponerme a pensar en la educación literaria de mi anfitrión. (Página
192)
IMPRESIÓN
PERSONAL
Pese
al tema que trata, no puede considerarse Hombres
desnudos como un libro erótico, por más que encontremos
alguna escena de ese carácter, porque el tratamiento que se da a las
mismas es de lo más ligero. Se describen más los sentimientos que
los hechos de las mismas.
Una
novela que va desnudando, más que los cuerpos, las almas de los
protagonistas, con sus cosas positivas y su lado negativo. Un lado
negativo mucho mayor del que a primera vista podría suponerse cuando
comenzaba a leer la novela.
Porque
lo que prevalece en Javier es su apocamiento. Y en Irene iremos
descubriendo un lado oscuro que ni ella misma sabía que tuviera, un
modo de entender la relación con los hombres, de manejar el poder,
que hizo que poco a poco fuese quitándose de mi mente la imagen de
una pobre mujer desvalida por el abandono de su marido.
No
me resultó empresa fácil empatizar plenamente con los personajes.
No terminaba de verme reflejado en ninguno de ellos y además,
pensaba que parte de sus desdichas me resultasen merecidas, justa
consecuencia de sus decisiones.
A
pesar de eso, el libro no se me caía de las manos, porque el estilo
narrativo hace que el ritmo sea muy ágil, consiguiendo crear unos
personajes que sentía como reales. Y eso es lo me que atrapa de
verdad en una novela.
Una
novela que, pese a que esperaba mucho de esta autora, me
ha sorprendido muy gratamente, por esa forma de narrar la
historia con la visión interior de sus personajes y por su ritmo
narrativo. Rematado por un final que me dejó noqueado.
Gracias
a Editorial Planeta que me
ha proporcionado un ejemplar de Hombres
desnudos para su lectura y reseña.
Pues me fío mucho de tu recomendación y esperaré a hacerme con la novela. En enero pasa por Málaga la ganadora y el finalista del premio y aprovecharé para hacerme con estas novelas. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarBesos
Sigo indecisa con esta novela.Lo que he leído anteriormente de la autora,no me convenció y he sufrido varios batacazos con Los Planeta.Pero claro,e leo a ti y me entran ganas de leerla.Ya veremos que hago.
ResponderEliminarBsos
La tengo esperando y después de leerte, con todavía más ganas, si es posible, que las que tenía. Besos.
ResponderEliminarPues me dejas con muchas ganas. No me había fijado mucho en este libro así que gracias.
ResponderEliminarBesotes!!!
No lo conocía pero me has convencido con la reseña
ResponderEliminarapuntado queda
un beesito
LA tengo pendiente¡¡ Un abrazo
ResponderEliminarNo he leído nada suyo y la verdad es que me gustaría!!
ResponderEliminarBesotes
Pedro, voy a fiarme de tus impresiones y lo terminaré leyendo. Sólo que la autora no me seduce, ya me leí hace unos años una novela de ella y me aburrió sobremanera. Supongo que con un libro que no nos haya gustado no se puede valorar a un autor, así que compraré el Planeta ganador de este año porque parece ser que promete.
ResponderEliminarBesos
Acabo de terminar este libro y me paso por aquí para comentarlo contigo. Me ha gustado mucho la frase que has utilizado en la reseña:Una novela que va desnudando, más que los cuerpos, las almas de los protagonistas. En efecto, tal y como se iban desnudando me iba enganchando hasta el FINAL. Sí un final sorprendente y que me ha encantado!! TE dejo mi reseña:
ResponderEliminarhttps://sofamantaylibro.wordpress.com/2017/05/25/hombres-desnudos/