El
marciano
Andy
Weir
Título:
El marciano
Autor:
Andy Weir
Editorial:
Ediciones B
Encuadernación:
Tapa blanda
Páginas:
408
PVP:
21,00 €
Editorial: Zeta bolsillo, 2018
Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
Páginas: 408
PVP: 9,95 €
ANDY
WEIR
La editorial nos cuenta del autor:
La editorial nos cuenta del autor:
Andy Weir nació y se crió en California. Hijo de físico e ingeniero, a los quince años fue contratado por un laboratorio nacional, donde desde entonces ha desarrollado una amplia labor como programador informático e ingeniero de software.
Su principal fascinación es la ciencia y en concreto los temas relacionados con la física relativista, la mecánica orbital y la historia de los vuelos espaciales tripulados. El marciano es su primera novela, y en ella ya se advierte que Weir es un excelente narrador y un purista de la exactitud científica.
Vendida a más de veinte países, best seller en EE UU e Inglaterra en un éxito boca a boca sin precedentes, lo que empezó como una novela autopublicada se ha convertido en todo un best seller en EEUU e Inglaterra, en extraordinario un éxito del boca a boca. Ridley Scott, director de clásicos como Blade Runner y Alien, prepara una adaptación cinematográfica.
Un
MacGyver en Marte
ARGUMENTO
Solo
habría estado «al mando» de la misión de haber sido el último
que quedara. Mira por donde, estoy al mando.
Mark
Watney es uno de los seis componentes de una tripulación que
formando parte del programa espacial americano ha tomado tierra en
Marte. Una repentina tormenta cuando el equipo está en el exterior
les hace retornar precipitadamente a la nave y en esos momentos un
accidente hace que el resto de la tripulación crea que ha muerto y
abandonen Marte dejándole solo
Marte
es una tierra desolada y estoy completamente solo en ella. Eso ya lo
sabía, por supuesto. Sin embargo, hay una diferencia entre saberlo y
experimentarlo realmente.
Acaba
de empezar una dura batalla por la supervivencia, en la que solo su
ingenio podrá salvarle, pues no tiene comunicación con la Tierra,
donde además supone que le dan por muerto.
Supongo
que ya se me ocurrirá algo. Eso o moriré.
EL
MARCIANO
El
marciano es una novela que viene precedida de elogiosas
críticas por parte de la prensa especializada y había llegado hasta
mis oídos confirmación de las mismas por algunos lectores que la
habían leído.
El
Wall Street Journal (que no es precisamente conocido por su atención
a la ciencia ficción...) ha dicho de EL MARCIANO que se trata de «la
mejor novela de ciencia ficción en años», y el Publishers Weekly
(ya más conocido en el mundo de la crítica de novelas de ciencia
ficción) afirma que «Weir enlaza los detalles técnicos con
suficiente ingenio para satisfacer al mismo tiempo el interés de los
aficionados a la ciencia ficción y al lector en general».
Tiene
una más que interesante introducción la novela en la que se nos
habla entre otras cosas de la actualidad de la ciencia
ficción,
un género que parecía estar en decadencia:
La
ciencia ficción parece haber perdido en los últimos años su empuje
anterior y suele reducirse en muchos casos a temerosas especulaciones
en torno a avances muy cercanos de la biotecnología o las
infotecnologías. Lo llamamos: el futuro cercano (near future).
El
título ya deshace cualquier posible equivocación. Estamos ante una
novela de ciencia ficción, lo cual probablemente aleje de esta
novela a aquellos que no son aficionados al género. Sería una
lástima, porque la situación que nos plantea El marciano es por
encima de todo realista. No hace falta ser un científico ni un buen
conocedor de la tecnología moderna para entender y apreciar esta
novela, en la que los avances científicos de la misma no son tantos
y son además compatibles con nuestros conocimientos actuales.
No
es ese el fondo de la cuestión, sino el de los sentimientos y el día
a día de un hombre que se encuentra solo en la inmensidad de Marte,
abandonado por una tripulación a la que no culpa de nada y ante el
dilema de dejarse morir o intentar sobrevivir los más de
cuatrocientos días que quedan para que aterrice una nueva misión en
el planeta.
Entronca
así El marciano con
novelas muy populares como Robinsón
Crusoe. No deja de ser un hombre abandonado en una isla
desierta (por más que ésta sea un planeta), que ha de recurrir a
sus propias fuerzas, a su ingenio y a lo que puede utilizar de
provecho de los restos del naufragio o en este caso de los restos de
material que dejó la nave al partir, para sobrevivir.
No
hay duda que es todo un reto plantear una narración con un único
protagonista, porque aunque sus otros compañeros de la nave
aparezcan en la novela, lo hacen de un modo muy fugaz. De ahí que, o
el autor consigue crear un protagonista capaz de captar y mantener la
atención del lector él solito, o no habrá quién aguante hasta el
final del libro.
Y
ese es el gran mérito de Andy Weir,
ha creado al astronauta Mark Watney, un hombre que en principio no es
ni el genio, ni el más inteligente ni el más heroico de los
miembros de la tripulación. En el fondo viene a ser el técnico de
mantenimiento de la nave:
Todos
en la misión tenían dos especialidades. Yo soy botánico e
ingeniero mecánico; básicamente, el manitas de la misión que juega
con plantas. La ingeniería mecánica podría salvarme la vida si
algo se rompe.
Imposible,
de ahí el título que le he puesto a esta reseña, no acordarse del
célebre MacGyver televisivo,
aquel que salía de cualquier apuro con el material que se encontrase
en esos momentos a mano. Justo lo mismo que hace nuestro astronauta,
que como su primera necesidad es conseguir alimentos, se monta un
huerto en marte. De ahí que nos de la siguiente frase, a propósito
de cómo conseguir en una tierra estéril el abono necesario para que
las plantas crezcan:
Mi
trasero está contribuyendo a mantenerme vivo tanto como mi cerebro.
Esta
frase nos define muy bien cómo es el personaje, que plasma en un
diario de a bordo el día a día de su estancia en Marte. Porque otro
de los motivos por los que fue seleccionado para la misión es su
carácter optimista y su sentido del humor, imprescindible para
convivir con sus compañeros tantos días en un espacio reducido
creando un buen clima de convivencia.
Por
eso la narración está llena de afirmaciones del protagonista como a
siguiente:
Dicen
que ningún plan soporta su puesta en práctica. Estoy de acuerdo.
O
esta otra en la que deja claro en que consiste su supervivencia:
Es
terrible que mi vida dependa de mis chapuzas.
O
aquella en la que nos habla de su principal aliado a la hora de
sobrevivir: la cinta aislante
La
cinta aislante funciona en todas partes. La cinta aislante es mágica
y digna de adoración.
Un
hombre al que sus compañeros de tripulación tienen en gran estima,
algo que tu también harás si te animas a seguir sus aventuras y
desventuras en el planeta Marte:
—Lo
superará, comandante. Ten fe. Ella sonrió sin alegría. —Rick,
sabes que no soy religiosa. —Lo sé. No estoy hablando de fe en
Dios, estoy hablando de fe en Mark Watney. Mira toda la mierda que le
ha tirado encima Marte, y sigue vivo. Sobrevivirá a esto. No sé
cómo, pero lo hará. Es un cabroncete muy listo.
IMPRESIÓN
PERSONAL
Parece
mentira como con tan escaso bagaje de personajes, consigue el autor
crear un universo tan verosímil y un ritmo narrativo (aunque a veces
yo aún lo hubiera acelerado más recortando las descripciones de
algunas de las chapuzas que se ve obligado a hacer para seguir
adelante) tan rápido y atractivo para el lector.
Y
parece adelantarse a lo que es el futuro del libro, al bromear el
protagonista con la posibilidad de que su vida, lo que está
plasmando en el diario, se convierta un día en una película. Hasta
título le pone:
Vivir
otro sol sería un título fantástico para una película.
Una
novela que no defraudará a los seguidores del género, pero que por
otra parte también puede ser disfrutada por aquellos a los que en
principio no les atrae, porque no deja de ser la historia de un
hombre enfrentado a la soledad y a la naturaleza hostil para poder
sobrevivir.
VALORACIÓN: 8/10
LA
PELÍCULA
El próximo 16 de octubre se estrena en los cines españoles la versión cinematográfica de El marciano.
A priori una gran película dirigida por Ridley Scott y protagonizada (y tanto, como que casi es el único actor que sale)por Matt Damon. Un director y un actor de fama y prestigio internacional que hacen suponer que a priori estaremos ante una gran adaptación de la novela.
Os dejo el trailer en español de la película:
Tienen muy buena pinta tanto el libro como la película. La verdad vengo leyendo reseñas de este libro desde hace poco y hasta ahora no he leído ni una mala crítica, aunque a mi este género no me llama mucho.
ResponderEliminarBuena reseña.
Un saludo.
A casi todo el mundo le gusta, pero a mí no me llama nada
ResponderEliminardudo que lo lea
un beesito
Lo leí este verano, y será porque soy astrónomo aficionado que la verdad me ha desilusionado ante tanta crítica buena. Me esperaba más. El tema no es que sea muy original. Es como Robinson Crusoe, pero en Marte. No voy a despedazar el libro, pero se pone auténticamente pesado con las cosas técnicas. Creo que se podía haber escrito con la mitad de páginas. Para Marte, me quedo con Tulipanes de Marte de Javier Yanes, ese sí que me gustó y sobre todo, me sorprendió. ¡Saludos!
ResponderEliminarPedro, justo iba leyendo tu reseña sobre esta novela y pensaba en "Robinson Crusoe" o, cinematográficamente hablando, en "El náufrago" de Tom Hanks. Entiendo que además de la ciencia ficción y la tecnología, van por ahí los tiros. Pues me has convencido, me la llevo.
ResponderEliminarTengo ganas de leerlo, la temática me encanta!
ResponderEliminarBesotes
A mi me llama desde hace bastante, y tengo muchas ganas de leer el libro, sobre todo ahora que ya está ahi la peli. No es un género que suela leer, pero creo que podría gustarme.
ResponderEliminarBesos