Una promesa es una promesa
Título: El mal camino
Autor: Mikel Santiago
Editorial: Ediciones B, 2015
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 427
PVP: 19,00 €
MIKEL
SANTIAGO
Mikel Santiago nació en Portugalete (Vizcaya) en 1975. Consagró su
juventud a tocar en bandas de rock y más tarde empezó a publicar
relatos y novelas cortas por Internet, con las que consiguió llegar
a las lisas de best seller en España y Estados Unidos.
Su
primer novela, La última noche en Tremor Beach, fue un éxito
rotundo de crítica y público. Ha vivido en Irlanda y Países Bajos
durante casi una década y ahora combina su actividad como escritor
con la música y el mundo del sofware.
ARGUMENTO
-Vale.
Empezaré por el principio.
-Perfecto.
-Creo
que me cargué un tío. (Página 20)
Una
noche, con dos copas de más encima, Chucks, músico que en su día
tuvo mucho éxito y que se haya en plena composición de un disco con
el que espera recuperar su fama y prestigio anterior, atropella de
vuelta a casa a un hombre al que cree haber matado, por lo que se da
a la fuga.
Arrepentido,
vuelve a los pocos días al lugar de atropello tras constatar que no
ha aparecido la noticia en ningún periódico. Sorprendido, se
encuentra con que no hay ningún rastro de haberse producido un
accidente.
Es
el comienzo de una historia en la que la fantasía y la realidad se
confunden.
EL
MAL CAMINO
Tanto
por el título, como por el argumento, o por esa portada que recuerda
a clásicos del género, podríamos pensar que estamos ante una
novela negra, muy negra. Pero no es el caso.
El
mal camino es un claro ejemplo de cómo la manera de
escribir pesa tanto o más que el argumento a la hora de calificar
una novela. Porque podía haber sido una novela que rozara el género
del terror, con pesadillas aterradoras, con un lector que leyera el
libro como si de una paranoia del autor se tratase.
Pero
muy al contrario, Mikel Santiago
ha escogido un estilo muy desenfadado. Tanto, que no he podido dejar
de pensar en la novela como si de una película se tratase, como una
de esas series policiacas que vemos en la televisión. Para ser
exactos, no he podido dejar de pensar en todo momento en Castle,
no solo porque el protagonista es un escritor de novelas de misterio
(algo en lo que coincide con la serie), sino porque tiene también
ese estilo de humor desenfadado a la hora de narrar los hechos. Tan
desenfadado, que en muchos momentos pasa desapercibido todo el horror
que se esconde tras esta historia.
Una
historia que me recuerda también a muchas de esas películas de
misterio americanas en las que se hace presente una urbanización
habitada por unos vecinos amabilísimos, super correctos, impecables
en sus modales pero que en todo momento tienes la impresión que tras
esa fachada impoluta se oculta algo terriblemente siniestro (por
ejemplo Las
mujeres perfectas).
Un
estilo que me hace pensar en autores anglosajones. De hecho si el
libro viniera firmado por John Smith, me lo creería. Nada hace
suponer que el escritor sea español, tanto por la ubicación de la
novela (los protagonistas son ingleses que viven en la Provenza
francesa), como por la ausencia de cualquier referencia profunda
hacia España.
Se
aleja mucho Mikel Santiago
de lo que podríamos considerar novela negra española. Porque aunque
sean muy distintas unas de otras, es fácil encontrar muchas
carácterísticas comunes entre los distintos autores españoles que
practican este género.
No
es peyorativo decir que me parece un autor anglosajón, simplemente
es otra manera de escribir, con un ritmo diferente, que en el caso de
El mal camino es altísimo.
La
historia está narrada en primera persona por el propio interesado,
un autor de novelas de misterio que se ve enfrentado a todo un
misterio que le plantea su amigo, al que en principio no cree. Claro
que ni el mismo termina creyéndose lo que le pasa a él:
No
es lo que piensas... Creo que estoy enfermo, otra vez. Eso es todo He
dejado de controlar mi imaginación y ahora es ella la que me
controla a mi. (Página 289)
Y
es que la narración transcurre jugando con la incredulidad del autor
o la del propio lector, que no sabe a qué carta quedarse, si pensar
que los sucesos realmente están ocurriendo o son fruto de una
imaginación desbordada o el fruto de un terrible pesadilla.
Un
juego que va complicándose cada vez más y más a medida que el
lector va siendo atrapada por la red que el autor va tejiendo en su
narración.
IMPRESIÓN
PERSONAL
El
mal camino es una novela que va de menos a más, haciendo que la
lectura sea vertiginosa, centrado en un personaje principal, un autor
de éxito que enreda doblemente al lector al introducirle en el mundo
de los escritores de éxito. Y vaya si lo ha tenido el protagonista
de esta novela, que se ha convertido en millonario. Como su gran
amigo, ahora en camino de revivir sus viejos éxitos musicales con lo
que está convencido de que es un maravilloso disco.
Lo
que pasa es que la creación en cualquiera de sus facetas no es algo
fácil de repetir, lo que lleva a nuestro protagonista a coquetear
con los estimulantes y con los fármacos para dormir, que tanta
tensión en intentar una nueva novela, le llevan a no conciliar el
sueño. De ahí que tanto su imaginación como la de su amigo estén
desbordadas, imaginando conspiraciones por doquier. ¿Reales?
¿Imaginarias?
Eso
es lo que iremos descubriendo en las páginas del libro. O mejor
dicho, intentándolo, porque hasta su trepidante final, no tendremos
nada claro, porque Mikel Santiago
consigue que dudemos también de nuestra desbordante imaginación
como lector.
Una
novela que bien podríamos encuadrar en la novela negra, si bien es
cierto que por su modo de narrar, deriva más bien hacia un thriller
psicológico que a una trama que bien pudiera haber sido mucho más
negra si el autor lo hubiese deseado, aunque probablemente, hubiera
sido mucho más dura de leer.
Quizás
mucho mejor así, con este protagonista capaz de reírse de sus
propias paranoias, de su vida que se encamina a un desastre total.
Como
dice el protagonista, una promesa es una promesa. Y Mikel
Santiago cumple cuando nos dice que la novela nos gustará.
Por eso tendrás diversión asegurada con El
mal camino.
Gracias
a Ediciones B que me ha
proporcionado un ejemplar de El mal
camino para su lectura y reseña.
Mikel Santiago se ha convertido en uno de mis autores de cabecera, me encanta como escribe porque tiene un estilo muy propio. Un abrazo! :)
ResponderEliminarLa tengo como lectura veraniega de vacaciones. Creo que me augura como dices diversión y entretenimiento.
ResponderEliminarBs.
Tengo que leer a este autor pero ya, no dejáis de hacerle buenas reseñas. Tengo en casa "La última noche en Tremore beach", así que a ver si me pongo estas vacaciones. Bss
ResponderEliminarSin duda un libro estupendo que hay que leer. A mi desde luego me ha conquistado con ese estilo tan personal
ResponderEliminarBesos.
Por las reseñas de este libro paso un poco de puntillas porque quiero leerlo aunque esperaré a leer el anterior, de todas formas tiene una pinta increíble.
ResponderEliminarUn beso!
Me convenció con su anterior novela y lo ha hecho con esta. Creo que va a ser un autor a seguir. Besos.
ResponderEliminarTengo que empezar a leer este autor, ya me lo han recomendado varias veces y además no paro de ver buenísimas reseñas. Un saludo
ResponderEliminarLo terminé el otro día y me encantó. A ver si consigo desliarme y hacer la reseña. Saludos
ResponderEliminarLe tengo muchas ganas, a ver cuando me pongo
ResponderEliminarun beso
Leí el anterior y me gustó mucho, así que supongo que este me gustará también.
ResponderEliminarMe tengo que poner con este autor sí o sí. A ver si le encuentro pronto un hueco. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarSaludos.
Me encanta el género! A ver si lo pillo por banda =)
ResponderEliminarBesotes
Me apetece muchísimo estrenarme con el autor, y lo voy a hacer con esta novela.
ResponderEliminarA ver qué me parece, pero por lo que contáis todos, creo que me va a gustar mucho.
Un beso!
Adictiva y emocionante hasta decir basta. He disfrutado tanto de este libro como del debut del autor.
ResponderEliminarUn abrazote.