El
dolor de la culpa
FICHA TÉCNICA
Título:
La última llamada
Autor:
Empar Fernández
Editorial:
Off Versátil
Encuadernación:
Tapa blanda
Páginas:
273
PVP:
17, 00 €
EMPAR
FERNÁNDEZ
Ha
publicado entre otras obras de ficción, Para que nunca
amanezca, Hijos de la derrota, Mentiras
capitales y Sin causa aparente.
Ha
sido finalista del Premio de Novela Fernando Quiñones con la obra El
loco de las muñecas y ganadora del Premio de Novela Corta
Rejadorada por La cicatriz.
Junto
a Pablo Bonell es autora de Cienfuegos, 17 de agosto, de
la serie de novelas negras protagonizada por Santiago Escalona y el
thriller Hombre muerto corre.
Ha
escrito La
mujer que no bajó del avión. La última llamada es
su última novela
ARGUMENTO
Noemí
ha terminado los exámenes de selectividad y sale por la noche a
celebrarlo. Pero regaña con su novio porque éste ha tomado unas
pastillas y decide volverse a su casa a pesar de que es de madrugada
y nadie va a acompañarla.
Como
hay un descampado para llegar hasta su domicilio desde la parada del
autobús, decide llamar a su padre, pero el teléfono de él está
apagado.
No
volverá a saberse nada de Noemí, que deja una familia destrozada y
sin saber qué es lo que ha sido de ella.
LA
ÚLTIMA LLAMADA
Afortunadamente
hay muchos tipos de novela negra e inevitablemente los argumentos
pueden repetirse. Que una chica desaparezca no es precisamente una
novedad en una novela de este género. La originalidad de La
última llamada está en el tratamiento que hace del tema,
porque lo importante no es tanto la búsqueda, sino el sentimiento de
aquellos que la buscan.
La
última llamada es un
análisis del sentimiento de dolor y de la
culpa de
aquellos que pierden a un ser querido, sobre todo, como es el caso,
cuando desconocen si el desaparecido está vivo o muerto. Un tema que
conocemos a través de la prensa y la televisión que hacen de estos
eventos una importante fuente de ingresos a partir del tratamiento
mediático que le dan:
Un padre en la pantalla pidiendo información sobre su hija desaparecida era un buen asunto, de los mejores. Y si la hija era guapa y corrían las lágrimas, un verdadero éxito. Una desaparición sin resolver de las que fijan al espectador al sofá o la butaca. Drama, dolor y un posible punto de sordidez que la productora se encargaría de encontrar. (Página 78)
Un padre en la pantalla pidiendo información sobre su hija desaparecida era un buen asunto, de los mejores. Y si la hija era guapa y corrían las lágrimas, un verdadero éxito. Una desaparición sin resolver de las que fijan al espectador al sofá o la butaca. Drama, dolor y un posible punto de sordidez que la productora se encargaría de encontrar. (Página 78)
Un
dolor del que en el libro se aprovecha un programa: Voces
del otro lado, que asegura poder ponerse en contacto con
los seres perdidos que están al otro lado, aquellos de los que
algunos tienen la necesidad de despedirse, de decirles aquello que no
pudieron decirle. Un programa al que Julio intenta acudir:
¿Que
darían algunos de ustedes para que las últimas palabras no fueran
las últimas? ¿Cuántas veces han pensado en una segunda
oportunidad? ¿No han soñado nunca con poder decir lo que no
tuvieron ocasión de decir? (Página 26)
La
desaparición de Noemí supone la destrucción de una familia,
comenzando por el padre, un transportista que, agotado por tanto
trabajo, apagó el móvil la noche en la que desapareció su hija,
por lo que no pudo escuchar su llamada, su última llamada. De ahí
el sentimiento de culpa que le está destrozando y convirtiendo en un
hombre alcoholizado:
Experimentaba,
tres años después de su desaparición, una inaplazable necesidad de
expiación. Yolanda le había asegurado una y mil veces que no
precisaba redimirse, que no había cometido error ni pecado alguno.
Pero no era eso lo que Julio sentía cada vez que recordaba que había
perdido una hija. (página 174)
En
cuanto a la madre, una mujer que siempre ha sido alegre, ha
desparecido adormilada permanentemente por las pastillas y los
tranquilizantes.
La
única que aún permanece en pie es Yolanda, la hermana mayor, que
trata de mantener el ánimo de la familia, a pesar de que cada vez se
le hace más difícil vivir en una casa que parece habitada por
muertos.
Junto
a este dolor, encontraremos también en la novela la
instrumentalización del dolor, la de aquellos que viven de
aprovecharse de los sentimientos y el dolor ajenos, personalizado en
un programa de televisión en que una presunta médium
asegura llevar el consuelo a aquellos que lo necesitan poniéndolos
en contacto con sus seres perdidos.
IMPRESIÓN
PERSONAL
Me
ha gustado mucho esta novela, más aún que su anterior La mujer que
no bajó del avión. Y lo ha hecho porque muestra la otra cara de la
moneda, la de aquellos que tienen que sufrir la desaparición de un
miembro de su familia, aquellos que no saben si están llorando a un
muerto o simplemente a alguien que voluntariamente o no ha
desaparecido y está vivo aún en algún lugar.
Lo
hace de un modo muy realista, mostrándonos una familia a la que
destroza el dolor. Unos personajes que en todo momento son creìbles.
Una
trama que se desvía de la investigación de una separación o un
crimen, en la que la policía
aunque aparece lo hace de un modo mínimo,
porque lo realmente importante no es el suceso en sí mismo, sino la
repercusión que tiene en las personas que han tenido que vivirlo,
las que tienen que sobrevivir y sobreponerse al dolor y a la culpa, a
ese “y si...” que no les permite levantar cabeza.
La
ultima llamada
mantiene la tensión desde las primeras páginas, a pesar de que no
existe ese aliciente de saber si Noemí está viva o muerta, o de
saber cómo terminará el intento de la hija de Julio, el padre de la
desaparecida de desenmascarar a la presunta médium. Contribuyen sin
duda, pero lo más importante es la evolución de los personajes, ese
sumergirnos en un dolor que podemos llegar a sentir como nuestro.
La
última llamada es
una novela que gustará tanto a los aficionados al género, como a
aquellos que lo que buscan es una novela en la que el sentimiento de
sus protagonistas sea lo más importante.
Gracias
a Editorial
Versátil
que me ha proporcionado un ejemplar de La
última llamada
para su lectura y reseña.
La tendré en cuenta. Por lo que cuentas me parece dura, muy dura, pero creo que me gustaría.
ResponderEliminarBs.
Leí su sinopsis en el blog de David y me llamo mucho la atención, tiene buena pinta.
ResponderEliminarBesos
Yo la tengo esperando y no tardaré en leerla.
ResponderEliminarPinta bien pero no me llama mucho.. si fuera una peli, quizá, porque como que es más visual
ResponderEliminarpero ponerme a leer algo así ahora no me apetece demasiado
un besito
De momento estoy un poco saturada de novela negra y no me termina de convencer... creo que la dejaré pasar de momento!
ResponderEliminarUn saludo,
Muy buena pinta que tiene. Pero tengo tanta novela negra pendiente que no sé cuándo podré hacerle hueco.
ResponderEliminarBesotes!!!
La tengo apuntada pero con tanto pendiente, no se cuando llegará su momento. Besinos.
ResponderEliminarParece muy interesante pero me la apunto para cuando esté preparada emocionalmente... parece muy dura! un besazo.
ResponderEliminar¡Qué buena pinta!
ResponderEliminarMe lo apunto sin duda.
Un beso!
Me apetece mucho!!! Apuntadísimo queda!! jeje
ResponderEliminarGracias
Saludos
El jueves pasado creo, la escuché en una entrevista en la radio y me dejó con ganas tanto de esta como de La mujer que no bajó del avión así que se vendrán pronto a casa ;) Las dos!
ResponderEliminarMe lo llevo, que pinta muy bien
ResponderEliminarLo leeré seguro, el anterior de la autora me encantó =)
ResponderEliminarBesotes