LA VIDA CUANDO ERA NUESTRA (MARIAN IZAGUIRRE)

Historia de una librería de viejo en Madrid


FICHA TÉCNICA

Título: La vida cuando era nuestra

Autor: Marian Izaguirre

Editorial: Lumen

Encuadernación: Tapa dura

Páginas: 412

PVP: 19,90 €

MARIAN IZAGUIRRE

De ella se nos dice en la solapa interior de la novela:

«Marian Izaguirre nació en Bilbao y ahora reside en Madrid, en una casa donde se van juntando amigos, libros y buena música. Licenciada en ciencias de la información, ha desarrollado tareas en el campo del periodismo y la publicidad, mientras se dedicaba a la escritura.

Hace veinte años que vio la luz su primera novela La vida elíptica, que obtuvo el Premio Sésamo. Desde entonces ha publicado cinco novelas más, de las que destacan El ópalo y la serpiente (1996), El león dormido (2005) y La parte de los ángeles (2011)

Sus obras han sido galardonadas con distintos premios, entre los que se cuentan el premio Andalucía y el Ateneo-ciudad de Valladolid

La vida cuando era nuestra es su novela más reciente.»

ARGUMENTO

«En el mismo instante en que vi la tienda, una librería de viejo con el escaparate lleno de lápices de colores, pinturas al pastel y libros de Julio Verne, en ese mismo instante, supe que estaba ocurriendo algo extravagante, y que dependía de mí la importancia que este hecho tuviera en el futuro. Podía darme media vuelta y olvidarlo todo. O podía entrar en aquel portar y hablar con él.

Entré.» (Página 13)

Madrid año 1951, Alice, una inglesa que lleva desde la guerra civil viviendo en España, decide de un modo imprevisto, víctima de un impulso seguir a un hombre, que finalmente la llevará hasta la puerta de una librería de la que es propietario.

Allí conocerá a Lola, la mujer de Matías el propietario, con el que a partir de la lectura de un libro, la llevará a trabar con ella una profunda amistad. Conoceremos así la difícil vida de Lola, una mujer que abandonó todas sus comodidades por amor, y que por amor guarda también un doloroso secreto:

«-¿Sabes que me pasa? -dijo abriendo las manos en el aire como si fuese a mostrar un secreto guardado hace mucho tiempo-. Que echo en falta la vida cuando era nuestra.» (Página 21)

LA VIDA CUANDO ERA NUESTRA

Lo primero que se me viene a la mente al recordar este libro es la metaliteratura. ¿Qué lugar más a propósito para hablar de libros que una librería? Buena parte de la acción transcurre allí, en una pequeña librería que a principios de los años cincuenta sobrevivía a base de la venta de material escolar o del intercambio de novelas “rosas”.

No son pocos los libros y autores que se citan en la novela. Por ejemplo: Nada (carmen Laforet), Industrias y andanzas de Alfahuí (Sanchez Ferlosio), Cumbres borrascosas (Emily Brontë), Jane Eyre (Charlote Brontë), Retrato de una dama (Henry James), Mientras agonizo (Faulkner)

Pero sobre todo, lo que transmiten los tres personajes principales, tanto Matías como su mujer Lola o Rose, es un amor total por los libros. Un amor que en realidad habría que calificarlo como pasión:

«Cuando te encuentres sola, lee un libro. Te ayudará a sentirte mejor.» (Página 68)

«Aquel invierno fue terrible. Nunca me he sentido más sola. Por fortuna había libros, libros, libros... Historias en las que refugiarse, historias por las que huir. Libros.» (Página 115)

Al margen de la metaliteratura, La vida cuando era nuestra va a mostrarnos dos historias de amor poco convencionales. Porque en la época franquista, en la que el divorcio no estaba admitido ni permitido, vivir con una mujer sin estar casado, no era fácil. Nos muestra también una realidad, la de aquellos que divorciados y vueltos a casar por la república, se encontraron con que de golpe aquellos divorcios y los nuevos matrimonios no eran válidos.

No menos impactante es la historia de amor de Alice. Un amor descrito años después con una bellísima comparación:

«A mis cincuenta y un años todavía no he conseguido saber cuál es mi verdadera patria. Tampoco me importa. Mi patria era Henry, el hueco de un hombro donde apoyaba la cabeza. Ya no necesitaba nada más. Solo a él.» (Página 55)

La historia está narrada en dos planos temporales y geográficos diferentes. Por un lado el Madrid de 1951. Por otro Francia e Inglaterra a comienzos del siglo XX, en vísperas de la Primera Guerra Mundial y al terminar ésta.

Dos planos narrativos también totalmente diferentes, pues la historia que tiene lugar en el extranjero son las memorias de Rose que Lola y Alice leen de un libro: La mujer del cabello de lino. La historia de una niña hija ilegítima del duque de Ashford. Una narración muy victoriana, de lucha contra una sociedad muy cerrada e hipócrita.

Muy diferente en el estilo es la historia de un Madrid que está a punto de comenzar a levantar cabeza tras la miseria que en la capital de España dejó la Guerra Civil. La historia de unos hombres y mujeres que con la guerra lo único que no perdieron fue la vida.

IMPRESIÓN PERSONAL

Hay libros que no son lo que esperan de ellos y te defraudan. Otros no son lo que esperabas y tal vez por ello, te enamoran. Ese ha sido mi caso con La vida cuando era nuestra.

Esperaba una historia de la postguerra en Madrid y esa es solo una parte de la novela, en la que por otra parte no se profundiza demasiado en los aspectos políticos y se limita a mostrarnos un retazo de la realidad de aquellos años. La de unos españoles que pese a su derrota se negaron a doblar la cerviz ante la vida y le echaron valor para seguir adelante. Un homenaje a los pequeños libreros de Madrid que sobrevivieron en una época muy difícil.

Lo que no esperaba es la otra parte de la historia, esa que nos lleva a una Inglaterra de principios del siglo XX con hijos secretos de la nobleza, con las castas sociales marcadas, con la hipocresía como modelo de vida.

Y por encima de ambas historias, el amor a los libros, a esos libros que como nos cuenta en un momento determinado marcan en nuestra juventud lo que va a ser nuestra vida, pero que cuando los leemos cuando somos mayores van borrándose con facilidad para dejar hueco a nuevas lecturas.

Es cierto que parte de la historia es previsible. Pero no importa, la historia no pierde interés porque sigue la intriga de cómo van a terminar encajando ambas historias, el saber adonde quiere llevarnos la autora.

Si te gusta leer, este es tu libro.

Lectura facilitada por la Biblioteca Municipal de Móstoles

VALORACIÓN: 9/10

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