La sangre de los inocentes
Julia Navarro
FICHA TÉCNICA
Título:
La sangre de los inocentes
Autor:
Julia Navarro
Editorial:
Plaza & Janés, 2007
Encuadernación:
Cartoné
Páginas:
780
Editorial: DeBolsillo, 2018
Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
Páginas: 784
PVP: 10,95 €
JULIA NAVARRO
Julia Navarro |
Nos dice la editorial en la solapa interior:
Julia Navarro es
escritora y periodista. Después de escribir varios libros de actualidad
política publicó s primera novela, La Hermandad de la Sábana Santa que logró un éxito sin precedentes situándose durante
meses en los primeros puestos de las listas de ventas, tanto nacionales como
extranjeras.
La Biblia de
barro y La sangre de
los inocentes afianzaron su prestigio entre
la crítica y el público. Tras ellas llegaron Dime
quién soy y Dispara,
yo ya estoy muerto,
que abordan de forma magistral la historia del siglo XX y supusieron un punto
de inflexión en su trayectoria literaria.
Es una de las autoras españolas con mayor reconocimiento
dentro y fuera de nuestras fronteras. Ha conseguido llegar a millones de
lectores en todo el mundo y sus libros cuentas con traducciones en más de
treinta países.
En
este blog puedes encontrar las reseñas de:
ARGUMENTO de LA SANGRE DE LOS INOCENTES
Este
es el argumento que facilita al editorial:
Soy espía y tengo miedo... Así empieza la crónica que
escribe en el siglo XIII fray Julián sobre el cruel asedio a
Montségur y la lucha entre cátaros y católicos.
Siglos después, en 1939, un medievalista agnóstico
emprende un peligroso viaje por el Berlín nazi en busca de su esposa de origen
judío.
En la actualidad, un grupo de musulmanes radicales se inmola en Frankfurt
dejando tras de sí un mensaje críptico que pone en estado de alerta al Centro
Antiterrorista de la Unión Europea, cuyos agentes, con la ayuda de los
servicios secretos del Vaticano, intentarán desvelar un enigma que une la
intolerancia de la Inquisición, la sinrazón fascista y el integrismo islámico
en una frase: «Algún día alguien vengará la sangre de los inocentes».
Un musulmán captado por una célula terrorista, un
jesuita experto en herejías, un conde francés obsesionado por una dramática
herencia familiar, un hombre misterioso -El Facilitador- que desde la
sombra maneja los hilos del poder junto a una intrépida joven de los servicios
antiterroristas protagonizan este apasionante libro sobre la venganza y la
traición, con el violento conflicto entre Oriente y Occidente como telón de
fondo.
LA SANGRE DE LOS INOCENTES
Tras
y La Biblia de
Barro,
Julia
Navarro
ha publicado La Sangre de
los Inocentes.
Un libro que me disponía a leer con interés, pero para que negarlo con serias
dudas, pues tras un inicio esperanzador con La Hermandad de la Sábana Santa su libro
siguiente La Biblia de
Barro
nos daba una da cal y otra de arena, con un irregular desarrollo de la acción y
unos personajes mal trazados y elementos de la acción poco creíbles.
Además
me daba miedo que nos fuera a contar otra de templarios (que intervienen) o
aprovechando el tema de los cátaros, otro poquito de esoterismo.
Afortunadamente
no hay nada de eso y la opinión del tema nos lo deja claro la propia autora por
boca de uno de sus personajes:
«Van a empezar a difundir especulaciones sobre Jesús y María Magdalena y habrá mucha gente deseosa de creerlo. El objetivo es dañar a la Iglesia, encontrarán quien escriba uno o varios libros, pueden inundar las librerías con novelas, falsos ensayos… Intentarán polemizar» (Página 327).
Interesante
comentario, porque refleja lo que pienso de mucha de la pseudoliteratura
histórica que padecemos hoy día.
Y
abundando en el tema, nos cuenta en otro momento:
«Una novela que trata de la historia puede ser muy entretenida, pero eso no significa que esté ofreciendo una versión real de lo sucedido». (Página 266)
Como
podéis ver, ella misma se pone el listón alto de partida.
Había
leído que la acción transcurría en distintos momentos históricos y pensaba que
estaría construida como es habitual en este tipo de libros, con dos acciones,
una en el pasado y otra en la actualidad que transcurrirían paralelas hasta
confluir en un punto dado (como ya hizo en sus dos novelas anteriores).
Pero
no es así, pues la novela avanza desde su inicio y se limita a tomar la primera
parte de la historia, la crónica de Fray Julián como eje central de la novela,
como causa y detonante de todo lo que sucede en la misma.
Un
eje central recorre todo el libro: La intolerancia. Pero una
intolerancia que no perdona, que lleva consigo el derramamiento de la sangre
del contrario, como algo que no es nuevo sino que se ha dado a lo largo de la
historia de la humanidad, con la excusa de la verdad y la religión.
Julia Navarro es consciente de la debilidad del
hombre:
«Todos los hombres pecamos por acción, por omisión o simplemente porque nos alegramos del sufrimiento de nuestros enemigos. Quizás no seríamos hombres si no lo hiciéramos» (Página 42)
Pero
esta comprensión no significa que no denuncie la raíz de todos los males: el
integrismo, el fundamentalismo de cualquier signo e incluso los nacionalismos.
LANGUEDOC
Empecemos
por el principio, y ese principio es en Languedoc (Francia) a mediados del
siglo XIII. Concretamente en Montsegur (Monte Seguro), donde se habían
refugiado los últimos cátaros frente al asedio del rey de Francia y la guerra
santa que el Papa había decretado contra ellos. Estos cátaros eran perseguidos
por herejes.
«El problema de la Iglesia es que sus sacerdotes no vivían de acuerdo al camino de humildad y pobreza señalado por Cristo». (Página 42).
Frente
a esta actitud de la Iglesia, surgieron los creyentes. Ellos se denominaban los
"buenos cristianos". Viven de acuerdo con las enseñanzas de Jesús,
comparten cuanto poseen con quien nada tiene y ayudan a quien lo necesita,
frente a la avaricia de la Iglesia, a la que llaman la Gran Ramera.
Consideran
la cruz como un instrumento de tortura y no conciben por ello que los
cristianos tengan que adorar un símbolo de sufrimiento.
El
cuerpo es la peor pesadilla, el manto del que hay que desprenderse para
convertirse en sustancia y encontrarse finalmente con Dios.
Castillo de Montsegur |
Refugiados
en el castillo de Montsegur, aislados y sin ayuda, resistieron mucho tiempo,
hasta que finalmente tuvieron que rendirse y tras negociar la libertad de los
que no eran de su creencia pero les habían ayudado, fueron quemados cientos de
ellos en un acto de barbarie con pocos precedentes.
La
inquisición española siempre ha tenido mala fama, pero la verdad es que las
mayores barbaridades fueron quizás la de los franceses.
Esta
matanza es recogida por fray Julián, dominico y notario de la inquisición, con
el alma dividida por el mal que estaba haciendo y por ayudar también a los
herejes. Esta crónica transmitida de generación en generación hasta nuestros
días, por los descendientes de aquellos nobles, es lo que da origen a la
venganza que provoca el resto de los acontecimientos.
«Algún día, mi señor, alguien vengará la sangre inocente que hemos derramado en nombre de la cruz, porque tanta sangre no puede quedar impune. Algún día alguien vengará con furia la sangre de los inocentes». (Página. 223)
Como
veréis no puede negarse que el título del libro está bien escogido.
FRANCIA (1938)
Es
la época previa a la invasión nazi de Francia. El conde D´Amis se pone en
contacto con Ferdinand Arnaud, profesor especializado en el medievo para que
autentifique el manuscrito de fray Julián, que se ha ido transmitiendo en su
familia de generación en generación.
La
esposa del profesor es judía y acude a Alemania por la desaparición de sus
tíos. Ella misma, desaparece también.
Asistimos
a otro acto de intolerancia y barbarie. Dicho en palabras del profesor:
«Nadie quiere ver nada, nos escandalizamos cuando nos dicen que los judíos llevan la estrella de David cosida en sus abrigos, pero no hacemos nada. Nos decimos que ya pasará, que esto no puede durar, que los judíos alemanes son sobre todo alemanes» (Página 170)
Portada alemana |
Pero
no solamente no pasa, sino que con la invasión de Francia por los alemanes, el
terror se reproduce allí también. Es la intolerancia de la que se cree una raza
superior y tiene que destruir todo lo que es inferior: judíos, gitanos,
comunistas y homosexuales.
Acabada
la guerra, David, el hijo del profesor está en Israel, dónde su padre lo había
enviado para ponerlo a salvo. Son los primeros momentos de la formación del
estado judío.
Más
intolerancia, la que no permite que judíos y palestinos puedan convivir en una
misma tierra, por más que muchos la hayan compartido durante años. Estalla la
guerra entre ellos y desde entonces, el odio no ha hecho más que crecer.
EN LA ACTUALIDAD
Se
ha producido un atentado en un cine de Francfort que se atribuye un grupo
extremista islámico. La agencia antiterrorista europea al investigar descubre
una conspiración cuyo fin es llevar a la guerra a musulmanes contra cristianos,
para lo que habrá tres atentados en Toribio, Roma y Jerusalén contra los restos
(supuestos) de la cruz de Cristo y en Estambul contra las reliquias del profeta
Mahoma.
Y
todo como consecuencia de esa mal entendida venganza contra la cruz, todo por
vengar la sangre de aquellos inocentes.
Tres
intolerancias más se nos van a narrar en esta tercera parte.
En
la primera y con mucho valor, la autora nos habla de la situación en el País
Vasco, del dilema que para unos sacerdotes vascos suponen unos jóvenes que han
golpeado a otros por no querer participar en actos de Kale borroka. Porque
alguno de ellos piensa que si les recriminan algo, los perderán, y si no lo
hacen, ¿dónde quedan las víctimas?
No
hay justificación, porque
«¿En qué circunstancias podemos justificar, matar, torturar, dar una paliza a quien no piensa como nosotros?» (Página 447).
O
dicho con otra reflexión de la autora
«¿Qué tipo de patria nueva se puede construir sobre los cadáveres de quienes no piensan como ellos?» (Página 448)
La
segunda intolerancia es sobre una mujer musulmana, que nacida en España, quiere
vivir su vida, de acuerdo con los preceptos musulmanes, pero sin aceptar el
yugo de una serie de costumbres como el velo. Actitud que no es comprendida por
los varones musulmanes.
La
tercera es la intolerancia religiosa de los musulmanes. Estamos en nuestro
país, con nuestras costumbres y nuestras leyes. Pero vienen de fuera y quieren
obligarnos a pensar y vivir como ellos, porque ya no se trata de un respeto a
sus costumbres, sino de que poco a poco intentan imponérnoslas.
A
ninguno se le ocurriría ir a un país musulmán en minifalda y con un superescote,
A fin de cuentas es su país y sus costumbres. Pero tampoco les obligamos a
venir aquí, y si lo hacen, no hemos de ser nosotros quienes nos adaptemos a sus
costumbres, sino ellos a las nuestras.
«Los musulmanes cada vez se muestran más exigentes y el gobierno más débil, preocupado por aparecer como el adalid de los derechos humanos… ¡como si esa gente lo agradeciera! ¡Quieren destruirnos, acabar con nuestra civilización!». (Página. 346)
«El mundo podía cambiar, pero los musulmanes debían unirse como un solo hombre, en una sola comunidad, para enfrentarse al enemigo cristiano, débil y desorientado». (Página 470)
OPINIÓN PERSONAL
La
sangre de los inocentes es un libro cada vez más adictivo según pasan las
páginas.
Pero
no es perfecto ni mucho menos. Creo que le hubiera venido muy bien las tijeras
que lleva en sus manos el mudo de los hermanos Marx, para aligerar algunas
páginas de la obra, especialmente en la segunda parte, en la que la historia se
alarga innecesariamente, cuando además no es tan imprescindible para el
desarrollo final de la novela.
Al
tocar tantos temas, no termina de profundizar realmente en ninguno, por lo que
podrás encontrar libros que te cuenten mejor la historia de los cátaros, del
holocausto judío, o la formación del estado de Israel. Pero para iniciarte en
ellos, puede ser más que suficiente.
A
mi gusto más interesante que los otros dos libros ya mencionados de Julia
Navarro y con un argumento más logrado y sin las incongruencias de su anterior
"Biblia”.
Lectura
facilitada por la Biblioteca Municipal de
Móstoles
Si quieres comprar el libro pincha en la imagen correspondiente:
Julia Navarro me gusta mucho. Su mejor novela para mi es Dime quien soy
ResponderEliminarPara mí el valor de esta novela radica en el hilo común a todas las épocas contadas, en cómo por la religión, o utilizándola como excusa, se llevan a cabo diferentes actos que al final derraman la sangre de los inocentes. La leí hace mucho tiempo pero todavía tengo grabada la historia que transcurre en una familia musulmana de Granada, creo que es la que más me impacto por lo real, frío y desgarradamente humano que puede llegar a ser un acto de ese tipo.
ResponderEliminarYo no acabo de congeniar con esta autora, leí aquella Biblia suya que se me hizo bastante indigesta y traté de empezar otra de sus novelas y no conseguí avanzar con ella.
ResponderEliminarBesos.
De esa escritora leí Dime quién soy y me parece que mete demasiada historia.
ResponderEliminarMe encantó cuando la leí. Esta y "Dime quien soy" son las mejores a mi juicio de esta escritora.
ResponderEliminarEsta es la única novela de Julia Navarro que he leído y me gustó, pero no me animo con ninguna otra, me dan pereza.
ResponderEliminarBesos
Uno de mis eternos pendientes!
ResponderEliminarBesotes