El Búho entre libros: LA SUERTE DE LOS IRLANDESES (J. L. ROD)

El topo de ETA

FICHA TÉCNICA

Título: La suerte de los irlandeses

Autor: J. L. Rod

Editorial: Ediciones B, 2014

Encuadernación: Tapa blanda

Páginas: 416

PVP: 17,00 €

J. L. ROD

La siguiente información es la que aparece en la página de la editorial:

J. L. Rod es guionista de cine y televisión. Desarrolla la mayor parte de su trabajo para la industria de Hollywood y ha participado en algunos de los proyectos de mayor éxito de los últimos años. También ha sido profesor de creatividad y desarrollo de proyectos audiovisuales en varios centros de formación.

Actualmente vive a caballo entre un pueblecito de la costa de Cádiz y Los Ángeles (EE.UU.), y trabaja en la adaptación al cine de La suerte de los irlandeses y en la siguiente entrega de la serie de Pat MacMillan.

Ha escrito dos novelas:

-La suerte de los irlandeses

-Mañana es otro mundo

ARGUMENTO

«Conmigo que no cuenten.» Esas fueron las últimas palabras que pronuncié antes de que sonara mi móvil avisándome de que acababa de recibir aquel maldito mensaje que cambiaría para siempre el resto de mi vida.

De nada le vale tener programado un viaje para desaparecer un año entero. Sí o sí tiene que ocuparse de un caso en el que la seguridad del Estado está comprometida: Hay un topo en el CNI (Centro Nacional de Inteligencia) pasando información a ETA. Es inminente un brutal atentado por parte de la misma.

—Te acabarás enganchando con el caso y aplazarás el viaje. ¿Qué te apuestas?

—Nunca apuesto, siempre pierdo.

—Confía en la suerte de los irlandeses. ¿No es eso lo que dices siempre que solucionas algo? «¡La suerte de los irlandeses, Zorro, la suerte de los irlandeses!»

PATRICK MACMILLAN

Comienza con La suerte de los irlandeses, una serie que tendrá como protagonista a este peculiar personaje. Dejo que sea él mismo el que se presente:

Mi nombre es Patrick MacMillan, pero todo el mundo me llama Mac. Mi abuelo era de Cong, un pueblo de Connemara, la región más bella de Irlanda. Vino a España a luchar en la Guerra Civil con las Brigadas Internacionales, dentro de la famosa Columna Connolly. A la semana de llegar se dio cuenta de que era una guerra estúpida de malos contra malos.

El abuelo dejó su semillita y años después nació nuestro protagonista. Sigo dejando que nos cuente a qué se dedica:

Soy agente de la división de Contrainteligencia del CNI, el servicio secreto español, conocido por todos los que nos ganamos la vida allí como «La Casa». Mi departamento no tiene nombre, pero es conocido como «El Carro de la Basura» o «Asuntos Húmedos». Qué más da, nombres distintos para la misma mierda, no existe en el organigrama. Nos ocupamos de operaciones de las que ningún otro de los tres mil quinientos agentes de La Casa puede ocuparse, salvo que esté dispuesto a ir a la cárcel por violar en una misma mañana cuatro o cinco artículos del Código Penal.

Es un hombre que vive solo, aún enamorado de una mujer que le abandonó. Un duelo que aún no ha conseguido superar. Solo y con pocas necesidades, aparte de una buena cerveza y un paquete de cigarros, pues es adicto a la nicotina. Poca cosa para un hombre que estuvo encerrado en un psiquiátrico tras la crisis que tuvo cuando le abandonó su mujer.

Solamente tenía una nevera llena, un equipo de música, un televisor conectado a un DVD, un ordenador, un sillón, una cama y muchas estanterías repletas de libros que leía en soledad. No era mucho pero tampoco era poco, y en ese momento de mi vida no necesitaba nada más.

Un hombre que vive al día, sin importarle mucho qué puede depararle un futuro que ve muy lejano:

—Dentro de un tiempo ya veremos, probablemente montaré algo. Tal vez una agencia de detectives de poca monta que persiga maridos infieles y empleados con falsas bajas laborales. Hay mucho de los dos, no me faltará trabajo.

Pese a tener que estar al día en las nuevas tecnologías, que ya me contaréis si no qué pinta un espía (a fin de cuentas eso es a lo que se dedica), no tiene ninguna simpatía por algunas de las nuevas aplicaciones de las mismas.Ved si no lo que dice sobre facebook

—Prefiero que un tipo con las manos muy frías me haga un examen de próstata escuchando de fondo a Lady Gaga que tener una página en Facebook.

O sobre youtube

—Hay que incorporarse a las nuevas tecnologías, no hay otro camino.

—Quita, quita. El día que descubrí YouTube me tiré tres días sin trabajar. No pienso volver a caer en ese error.

Pero si hay un rasgo que define por encima de todos a Mac, es su peculiar sentido del humor. No es el suyo el humor de los cínicos, sino un humor ácido que carga contra todo lo que se le ponga por delante

—Las estadísticas son como las minifaldas, te dan buenas ideas pero esconden las cosas importantes...

—Es usted muy ingenioso, MacMillan...

—O te ríes un poco de la vida o te encierras en un banco con un rifle y abundante munición, no hay otra.

O este otro ejemplo no menos ácido:

—Si Almodóvar ha conseguido vivir del cine y Marilyn Manson de la música, supongo que yo no me moriré de hambre. A lo único que aspiro ahora mismo es a no trabajar en nada, reivindico el sagrado derecho a la pereza por razones de salud mental.

Un hombre que ante todo busca la felicidad

—Yo soy de los que nadan aguas arriba, contracorriente. Lo sabes de sobra, Zorro, me conoces mejor que nadie. Hay mucha mierda a los dos lados del río, pero a mí no me importa, yo sigo mi camino buscando la felicidad. No sé si algún día me encontraré, pero sigo buscándome.

No es precisamente un “garrulo” Pat MacMillan, un amante de la filosofía entre otras cosas, que va sembrando de citas el libro:

No pude evitar recordar las palabras de Jay Leno: «Cuando beses a un político recuerda que no solo le estás besando a él, sino también a cada culo que ha besado durante los últimos cuatro años.»

O esta otra de Churchill:

El éxito consiste en moverse de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo.

LA SUERTE DE LOS IRLANDESES

No es fácil encuadrar en un género concreto esta novela, quizás porque no es habitual en España esta mezcla de novela de espías, thriller de acción y un cierto toque de novela negra. Sumadle a eso una situación reciente de nuestra España como el fin de ETA con todas las connotaciones políticas del mismo, para darse cuenta de que estamos ante una novela muy peculiar.

No creáis que el tema de ETA es un apunte sin más, porque en realidad es el eje principal de la novela, pues habla de los agentes infiltrados en la misma y de los servicios de inteligencia españoles.

Nos presenta un momento de ETA muy próximo en el tiempo, en el que en la misma había dos tendencias: la entrega de las armas o recrudecer las acciones para conseguir el objetivo de la independencia de Euskadi.

Como lector no me he sentido cómodo en algunos momentos con los planteamientos que se hace sobre el fin de ETA, pues se reproducen algunos de los pensamientos más extremistas, aquellos que se oponían a cualquier tipo de negociación y querían la liquidación pura y dura

—Es necesario acabar con ETA de una vez por todas. Ya ha habido cerca de mil muertos, está en nuestra mano que no haya ni uno más.

Una novela en la que no tenemos muy claro quiénes son los buenos y quiénes los malos. Normal, pues se trata desde ese punto de vista de una novela de espías, de topos introducidos en los servicios de inteligencia.

Una novela muy actual en que la otra protagonista, pringándolo todo a su paso es la corrupción, los chanchullos que todo lo contaminan, el dinero fácil ganado sin escrúpulos y sin importar quién caiga por el camino.

Muy dura esta novela, porque la sensación de que la fantasía es superada a veces por la realidad, está presente en todo momento en la novela. Será ficción, pero por momentos yo tenía la impresión de que nos contaba una historia real, que ha tenido lugar.

Y si no se hace tan dura es porque, especialmente en la primera parte del libro, el sentido del humor del protagonista está muy presente.

De hecho, el libro está salpicado de frases que pueden provocar la carcajada o como mínimo la sonrisa del lector:

El divorcio es cuando tu mujer decide vivir con tu sueldo pero sin ti.

Su progenitor había sido años atrás Secretario de Estado en el Ministerio del Interior y era un claro ejemplo de que el éxito en la vida radica en elegir bien a tu padre.

Fíjate si me ha afectado la crisis que tengo un niño apadrinado en la India y me manda diez euros todos los meses.

—Esta casa funciona como todas. Yo opino y mi mujer decide.

IMPRESIÓN PERSONAL

Ediciones B ha puesto a mi disposición las galeradas de Mañana es otro mundo, la segunda novela que tiene como protagonista a Pat MacMillan. Por eso decidí leer primero la primera, que es la que hoy os he presentado.

Creo que he hecho bien, porque he quedado tan impactado con la misma, que estoy deseando leer la segunda. Quiero eso sí dejar claro que La suerte de los irlandeses es una novela con una acción autoconclusiva. Queda completamente cerrada. Otra cosa distinta es que un personaje tan impresionante como el que nos presenta no se deje de lado y vuelva a aparecer en otra novela como es el caso. Si solo te apetece leer esta (seguro que una vez que la leas querrás más) puedes hacerlo sin que te quedes a medias.

Una novela que tiene todo para atrapar al lector: mucha acción, un protagonista con mucha personalidad, sentido del humor, intriga...

Hacía tiempo que una novela no me atrapaba de esta manera, por eso solo puedo recomendar que te dejes enganchar por la misma.