La huerta de la esperanza
FICHA TÉCNICA
Título: Dispara, yo ya estoy muerto
Autor: Julia Navarro
Editorial: Plaza & Janes
Encuadernación: Tapa dura
Páginas: 912
PVP: 22,90 €
Editorial: Punto de Lectura, 2016
Encuadernación: Tapa blanda
Páginas: 912
PVP: 10,95 €
ARGUMENTO
«Hay momentos en la vida en la que la única manera de
salvarse a uno mismo es muriendo o matando. Aquella frase de Mohamed Ziad la
había atormentado desde el mismo instante en que la había escuchado de labios
de su hijo Widi Ziad.»
Así comienza la novela de Julia
Navarro, con una frase que se repetirá a lo largo del libro, pero que solo
tendrá su culminación en el cierre del libro. Un libro que termina con la frase
que le da título:
«Dispara, yo ya estoy muerto.»
Una novela que arranca en el
presente para narrarnos una historia que comienza a finales del siglo XIX y
termina a mediados del siglo XX. Es la historia de la familia Zucker, que
comienza con Ismael, peletero que al regreso de un viaje de negocios desde
Francia se encuentra con toda su familia asesinada en un progromo.
Una historia que continúa con la
persecución de los judíos por la policía secreta del zar que culmina en la
huida de su hijo Samuel y su llegada a Palestina, donde compra unas tierras
para formar la Huerta de la esperanza, un espacio en el que convivirán con la familia Ziad
en una relación de sincera amistad que tendrá que sobrevivir al enfrentamiento
entre judíos y árabes, a la formación del nuevo estado de Israel.
DISPARA, YO YA
ESTOY MUERTO
Enfrentarse a novecientas páginas (y a su peso si no se trata de un
ebook)no es un hecho habitual, de ahí que no sea extraño que muchos tengan
dudas a la hora de animarse a la compra o a la lectura de una novela de semejante
porte. Yo mismo me enfrento a esas dudas.
Por eso con esta reseña, siempre desde mi punto de vista, quiero aclarar a los posibles futuros
lectores qué van a encontrar en la lectura de Dispara, yo ya estoy muerto.
Dudas ante su lectura que no disipan las anteriores novelas de Julia
Navarro, porque frente a la entretenida La hermandad de la sábana santa
tenemos también La biblia de barro, para mí un fallido thriller con
pocos pies y cabeza. Tras La sangre de los inocentes que supuso un
interesante giro en la obra de Julia Navarro llego Dime quien soy, todo
un éxito de ventas que a mí no terminó de convencerme porque en ningún momento
conseguí enganchar con la protagonista de dicha novela.
Pese a todo me animé con Dispara, ya estoy muerto, que al igual
que Dime quien soy, es
una novela histórica que abarca un amplio periodo de finales del siglo XIX a
mediados del siglo XX (aunque la historia llegue en su desenlace hasta
el momento actual, en realidad se desarrolla hasta mediados del siglo XX)
Varios son los puntos en los que se sustenta esta novela, comenzando
por las guerras
religiosas, a un enfrentamiento que por más que lleve siglos produciéndose,
carece de sentido
«¿Hasta cuando vamos a permitir que la religión nos
separe y provoque una mirada diferente de unos hacia otros? Huimos de Rusia
porque nos perseguían no solo porque somos judíos, también porque queremos un
mundo diferente, donde todos los hombres seamos iguales, tengamos los mismos
derechos y deberes, donde no se persiga a nadie rece a quien rece,piense lo que
piense. Un mundo sin Dios, sin ningún Dios en cuyo nombre los hombres luchen
entre sí.» (Página 260)
Aunque el pensamiento esté puesto
en boca de un judío, es válido para cualquier hombre de bien. ¿Hay algo más en
contra de cualquier religión que intentar imponer nuestras ideas a puñetazos (o
a bombazos que es el paso siguiente?
«Me parece absurdo que los hombres nos peleemos por
creer que el Dios al que rezamos es mejor que el Dios de los otros.» (Página 325)
Pero al margen de sentimientos
religiosos, otra de las necesidades del hombre, por la que peleará hasta la
muerte si es necesario, es la necesidad de pertenecer a un sitio. El problema es cuando a ese sitio se le pone un
nombre: patria.
«Quiero que este sea el hogar de mi hijo y el de mis
nietos. Quiero que no vuelva a ser extranjero en ninguna tierra, que no les
expulsen ni les persigan diciendo que son diferentes. De aquí, de nuestra
propia patria nos expulsaron, pero hemos vuelto y algunos estamos dispuestos a
no irnos jamás» (Página 351)
Cuando ese sentido de patria se ve
además mezclado con intereses y conflictos religiosos o de raza, tarde o
temprano tendremos una guerra.
Nos presenta además el estado de
Israel como un sueño. Porque el germen, más allá de los pensamientos
religiosos, fue el de un espacio en el que poder llevar a cabo los pensamientos
socialistas, los mismos que había hecho a muchos hombres huir de Rusia.
«Ser socialista significa creer que todos los hombres
somos iguales sin distinción de razas ni religión.» (Página 442)
Es evidente que este pensamiento
socialista está muy lejos de esas guerras religiosas y étnicas que luego
tendrían lugar:
«Se había hecho mujer con las ideas socialistas de sus
padres, que eran ante todo internacionalistas y pensaban que árabes y judíos
tenían otros problemas que no eran los del nacionalismo.» (Página 588)
¿Qué es pues lo que llevó al enfrentamiento entre
árabes y judíos? De eso es de lo que trata el
libro, que intenta aclarar con la mayor objetividad posible cómo se llegó a
esta situación. Porque lo cierto es que las tierras que tenían los judíos no
eran conquistadas a la fuerza sino compradas a los propios árabes o a sus amos,
en aquellos tiempos a finales del siglo XIX y principios del XX el imperio
turco.
Un equilibrio que poco a poco fue
rompiéndose con la llegada de sucesivas oleadas migratorias desde toda Europa,
que tuvieron su culmen con el éxodo masivo provocado por las masacres de
Hitler.
No voy a detenerme más en este
punto, porque si quieres enterarte mejor que leas la novela.
Una novela con detalles muy
curiosos como el hecho de que a pesar de transcurrir a lo largo de un siglo y
por tanto con numerosísimos personajes, no se repite el nombre
de ninguno. Es de agradecer que no se llamen todos Antonio Buendía
y nos terminemos perdiendo en el mismo nombre repetido una y otra vez.
Dos voces son las encargadas de
narrar la historia en la actualidad, la del viejo Ezequiel, el nieto de Ismael, que nos narrará
la historia desde el punto de vista de la familia Zucker y la de Marian, una
trabajadora de una ONG que está realizando un estudio sobre los asentamientos
judíos en Palestina, que será la encargada de contar la historia desde el punto
de vista de la familia Zias.
Dos historias que necesariamente han
de irse sobreponiendo pues los Ziad eran arrendatarios de los Zucker y
crecieron y lucharon codo con codo hasta que dicha convivencia pasó a ser una
utopía.
Una historia que lleva en sí misma
los dos puntos de vista, el de los judíos y el de los árabes.
IMPRESIÓN PERSONAL
Tengo que reconocer antes de
comenzar a leer esta novela, tenía mis dudas, porque no quedé muy convencido
con Dime quien soy. Pero después de haberme leído sus novecientas
páginas, he de decir que me ha gustado Dispara, yo ya estoy
muerto tanto por su desarrollo, como por
su espectacular y sorprendente final.
Parece difícil no tomar partido en
el conflicto palestino-israelí, pero Julia Navarro ha
conseguido mostrar las dos caras de la moneda, exponiendo las razones de una y otra parte. Porque lo
cierto es que ambas partes tienen razones de peso, de ahí que sea tan difícil
llegar a un acuerdo.
Una novela histórica en la que los
personajes tienen mucha importancia. Una historia
en la que Julia Navarro nos remarca aún más la dureza de la
situación a partir de unos personajes que son buenos. Aunque pueda parecer mentira en una novela de
novecientas páginas, no recurre Julia Navarro a la lucha de los “buenos” contra
los “malos”. No existen, no hay buenos y malos, porque no es esa la causa del conflicto palestino. Es
la historia de la degradación de un ideal, el de los hombres iguales entre sí
al margen de la raza, religión, sexo o condición. Una degradación provocada por
el egoísmo y el interés de unos pocos, la mala conciencia internacional y la
pasividad de unas naciones que lo que menos quieren es propiciar el diálogo.
Gracias a Editorial Plaza
& Janes que me ha facilitado un ejemplar
para su lectura y reseña.
Tantas páginas dan respeto pero normalmente la experiencia suele ser satisfactoria. Yo si quiero leerlo, sobre todo para enterarme de las razones del conflicto. Me gusta que sea objetivo
ResponderEliminarComo siempre, una reseña impecable, y, aunque no creo que por el momento pueda embarcarme en esta interesante novela de Julia Navarro, desde luego, la tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn afectuoso saludo.
Sólo he leído "La sangre de los inocentes" y me gustó, con tu reseña me animas a leer esta.
ResponderEliminarSi tenía ganas de leerla, ahora más; ese conflicto que describes y el intento de la autora por explicarlo merecen la pena,
ResponderEliminarsaludos
Una reseña buenísima, espero leerla pronto, ya que me gusta mucho como escribe Julia Navarro, besotes
ResponderEliminarYa te comenté, creo , que tengo la autora pendiente...pero quería comenzar por el anterior
ResponderEliminarA mi no me duele comprar libros "gordos", al contrario, ya que los pago por lo menos que me duren más ;) Lo malo es que si es un truño, es más dificil de digerir si tiene muchas páginas. No parece el caso de este, del cual de momento estoy viendo comentarios positivos, lo que me anima bastante.
ResponderEliminarGracias por la estupenda reseña y un saludo!
Hola,
ResponderEliminarhe estado leyendo tu blog y me ha gustado mucho, sobre todo porque compartimos el mismo tipo de literatura. He de decir que el último de Julia Navarro me lo terminé hace una semana. Como cuando estudiaba en la universidad el tema palestino-israelí me impactó profundamente, sabía que este libro, si estaba bien documentado, no me iba a decepcionar. Porque algún libro de la autora sí me ha decepcionado.
Sin embargo, este libro lo he disfrutado mucho. Conociendo la historia, siempre me he solidarizado con los palestinos, por lo que en esta novela he sentido cierto 'choque' -por llamarlo de alguna manera- al leer sobre los pensamientos y sentimientos de los judíos. Julia Navarro se afianza como una buena narradora. Y cada nueva novela lo mejora.
Es una magnífica reseña. Un saludo
¡¡Que ganas de leerla!! Parece que en esta novela Julia Navarro ha superado su problema con los finales. Un beso.
ResponderEliminarHola... no coincido en tu opinión sobre este libro, pero admito que tiene puntos positivos, los que señalas en cuanto a enmarca la trama en un conflicto tan delicado. Más que su extensión asuste, lo que es extenso en la proliferación de detalles que entorpecen la historia, al menos desde mi punto de vista.
ResponderEliminarY la verdad, no sé si soy la única, pero yo el final lo veía venir cuando aún me quedaba un 20-15% del libro (leo en ebook) porque como dices tú, la frase que da título al libro no aparece hasta el final. Y no me parece para nada que yo sea buena en destripar finales, sino que en este caso no veo la originalidad, de hecho veo lo predictible que es que acaba así...
En fin, como todo en la vida, hay gustos para todos :-)
Un abrazo!
Inés
Me alegro de que te haya gustado. A mi no me importaría leerla viendo que hay tantas buenas reseñas pululando por ahí, pero no está entre mis prioridades.
ResponderEliminarBesos.
me viene bien para mi reto de leer obras escritas en español, así que me lo voy a pensar (la extensión y el peso me ponen en contra).
ResponderEliminarUn abrazo,
Ale.
Tengo la novela pendiente de lectura pero me alegro por leer tu comentario pues veo que está escrita desde un punto de vista imparcial y eso es de agradecer. Me recuerda, salvando las distancias, claro está, a Todo lo que cabe en los bolsillos, que también se reflejaba la temática desde los dos bandos. Una buena novela, por lo que veo, para estrenarme con Julia Navarro pues, aunque parezca raro, no leí nada de esta autora. Un abrazo.
ResponderEliminarSoy lector incondicional de Julia Navarro, todo lo que he leído de ella me ha gustado muchísimo. Espero leer esta novela pronto.
ResponderEliminarUn saludo.
Ya veo que Julia Navarro da buenos finales a su novela. Si me toca en un sorteo al que estoy apuntada, bieno, si no paso de leerlo, Dime quién soy me decepcionó un poco.
ResponderEliminarEstupenda reseña, me animas a leer la novela, pues el tema es muy interesante y por lo que explicas la autora ha conseguido tratarlo de manera objetiva.
ResponderEliminarUn beso
Menuda notaza !! Este libro tengo claro que lo voy a leer aunque un poco más adelante, me espero a la mantita en el sofá.
ResponderEliminarMe apetece hacerme con el, más después de tu reseña. El número de páginas me da un poco de respeto, pero acabaré leyéndolo
ResponderEliminarPorque aún me quedan libros de la autora por disfrutar, pero éste por su temática y por tu reseña, me apetece mucho. Pero tendrá que esperar a que lea antes otros.
ResponderEliminarBesotes!!!
De momento lo estoy leyendo y me está gustando, esty de acuerod con algunas de las cosas que nos cuentas. Besos.
ResponderEliminarHola Pedro, aunque no te lo creas, no he leído nada de Julia Navarro, tengo en casa La Biblia de Barro pendiente por leer. Suelo huir de los títulos megapopulares, este me lo regalaron y cuando tenga algo de tiempo lo leeré. Los libros de religiones y política suelen ser controvertidos, pero leyendo tu reseña parece que la autora a tratado bien el tema.
ResponderEliminarMe alegro de conocer tu blog.
Saludos!
Podemos charlar juntas
Tengo muchas ganas de tenerlo!!!!! Me encantó su anterior novela y no pienso perderme esta!!!!!
ResponderEliminarSaludosss ;-)
Me encanta la autora, el libro cae fijo =)
ResponderEliminarBesotes
A mí un libro tan largo me echa para atrás, pero no por su extensión, sino por su peso: es imposible llevarlo en el transporte público.
ResponderEliminarPero como hablas tan bien de él, lo leeré en navidades.
Un beso!
Llevo la mitad de esta novela porque voy leyendo otros libros, no es fácil transportar tanto peso, jaja. Es la primera novela que leo de Julia Navarro y eso que tengo algunas otras en casa, pero tantas páginas me dan mucha pereza. De momento me gusta mucho.
ResponderEliminarBesos
Si te gusta Julia Navarro, te invito a probar "Regalo de Reyes"
ResponderEliminarhttp://regalodereyeslanovela.blogspot.com
Una intriga apasionante, divertida e inteligente
Yo, al contrario que tu, tan solo he leído esta novela de Julia Navarro, por tanto, no iba con ningún tipo de expectativa ni miedo a lo que me iba a encontrar. Como nunca había leído sobre este conflicto en particular, me resulto muy interesante, y he de decir que aprendí alguna que otra cosa que no sabía. Me gustó mucho y no descarto leer otro título de la autora, quizás continúes con "La sangre de los inocentes", que has mencionado, y que parece que no está mal.
ResponderEliminarYo estoy leyendo la novela ahora mismo y he de decir que estoy superenganchado a ella. Ya lo estuve a Dime quien soy, y en esta, además de vivir lo que viven los personajes, estoy descubriendo página a página la historia que nos está tocando vivir.
ResponderEliminar