EL SILENCIO DE TU NOMBRE (ANDRÉS PÉREZ DOMÍNGUEZ)

Espías en la España de los años 50

FICHA TÉCNICA

Autor: Andrés Pérez Domínguez
Título: El silencio de tu nombre
Editorial: Plaza & Janés
Encuadernación: Tapa dura
Páginas:604
PVP:20,90 €







ANDRÉS PÉREZ DOMÍNGUEZ

Esto es lo que el autor nos cuenta desde la solapa de su novela:

«Nací en Sevilla el mismo día que Neil Armstrong ponía el pie en la luna. Hace bastantes años lo dejé todo para dedicarme a inventar historias. Muchos pensaron que estaba loco, algunos que era un valiente, pero tal vez es que no tenía otro sitio adonde ir. Todavía no me he arrepentido.

Desde entonces he ganado algunos premios y he publicado además de novelas cortas y relatos varias novelas: El violinista de Mauthausen (2009, Premo Ateneo de Sevilla y Finalista del Premio Espartaco de Novela Histórica en la Semana Negra de Gijón), El síndrome de Mowgli (2008, Premio Luis Berenguer), El factor Eisntein (2008) y La Clave Pinner (2004, finalista del Memorial Silverio Cañada en la Semana Negra de Gijón.

Estoy convencido de que la principal razón por la que alguien dedica su tiempo a leer ficción es para disfrutar. A mi me gustan las novelas que cuentan historias, los libros en los que pasan cosas los que me emocionan y al terminar de leerlos me falta tiempo para recomendarlos. No puedo sino intentar transmitir a mis lectores el mismo entusiasmo.»

ARGUMENTO

«Una millonaria beata, dos nazis nostálgicos de tiempos mejores y un agente norteamericano que se larga cuando las cosas se ponen feas —concluyó—. Puede que sean buenos elementos para una novela, pero en el mundo real resulta bastante raro mezclarlos. —Y más, si añadimos a un español exiliado, un periodista comunista y a la viuda de un agente alemán.» (Página 502)

Una curiosa mezcla de personajes la que nos presenta esta novela, con unas situaciones no menos pintorescas, para un relato de intriga y acción total:

«Nazis que añoraban tiempos mejores, una mujer de la que estaba enamorado y a la que cada vez estaba menos seguro de conocer; y ahora un tesoro escondido, como en una novela de piratas. Sólo esperaba que él no fuese el último en enterarse de lo que pasaba, o que cuando llegase el momento de saber la verdad no fuera demasiado tarde.» (Página 301)



LA NOVELA

Esta es la segunda novela que leo de Andrés Pérez, pues hace unos años ya disfruté con el violinista de Mauthausen, con la que además del personaje del agente Bishop que aparece en ambas, guarda muchos elementos en común.
Como su anterior novela, es una mezcla de géneros. Por una parte es una novela histórica que nos muestra una España en la que está en plena vigencia la dictadura de Franco y que tras el fin de la Segunda Guerra Mundial dicho régimen no ha perdido fuerza. Es más, se va produciendo un lento acercamiento con Estados Unidos por aquello de que aunque España es una dictadura, en plena pugna con Rusia, no hay dudas del anticomunismo del régimen español.
Un partido comunista que sigue luchando en España desde la clandestinidad, bajo los dictados de Rusia y con métodos que no difieren mucho de las mafias.
Pero no es solo novela histórica, pues tiene mucho de thriller, de novela de espionaje. A ello hay que sumarle un cierto toque de novela negra y su pizca de romance para combinar un cóctel que Andrés Pérez hace funcionar a la perfección.

En dicho cóctel encontraremos:

-Acción: Desde la primera a la última página, la acción es constante, sin dar un momento de descanso al lector.

-Escenarios variopintos: Desde Alemania, París, pasando por Andalucía o Madrid, en cuyas calles transcurre una buena parte de la novela.
Un Madrid cuyo retrato nos ofrece de un modo muy nítido el autor:

«Once años después del final de la guerra civil, España seguía siendo un país deprimido en el que la mayoría de la población tenía que hacer juegos malabares con las cartillas de racionamiento para poder comer tres veces al día, pero también era cierto que, para alguien con el dinero suficiente, Madrid resultaba una ciudad espléndida en la que vivir. » (Página 332)

-Intriga: ¿Qué secretos ocultan los protagonistas? ¿Existe ese tesoro que todos parecen querer encontrar?

-Romance: Un amor que convierte a sus protagonistas en sospechosos a los ojos de sus camaradas, que los vigilan estrechamente.


El silencio de tu nombre es todo eso y mucho más, pues no deja de ser una reflexión sobre los ideales perdidos, sobre la lucha por defender esos ideales que un día marcaron la vida de unos hombres. Una lucha por una causa que se sabe perdida de antemano:

«Llega un momento en el que te das cuenta de que ya no vas a poder ganar, pero entonces, sin saber muy bien la razón, te ilumina una especie de lógica retorcida, y la única conclusión que puedes sacar, por mucho que te sorprenda, es que a lo mejor son las causas perdidas las únicas por las que merece la pena luchar.» (Página 140)

Todo aderezado con una historia de amor, por momentos de lo más romántica, con algunos pasajes muy bellos como aquellos que dan nombre finalmente a la novela:
«Navarro comprendió, y aceptó, que había llegado el momento en que no quería sino pronunciar el nombre de una mujer el resto de su vida. A veces se sorprendía en silencio, y es ausencia de voces no era más que la presencia evidente, deliciosamente inevitable, de Erika. El nombre de ella presente en cada suspiro, en cada gesto insignificante. Como un sonámbulo, como un demente. el nombre de ella en cada silencio. Sobre todo en cada silencio.» (Página 83)


Bien es verdad que la novela no sería nada, por mucha acción que tuviera si no estuviese poblada de unos personajes interesantes que son las que la mantienen en pié. Comenzando por el Capitán Martín Navarro, el protagonista. Un luchador que combatió en la guerra civil española en el bando republicano, para terminar con el grado de capitán en los ejércitos rusos combatiendo a los nazis para terminar como ejecutor del partido comunista.
Pero ahora ya no ve las cosas tan claras. Su fe en el partido se va resquebrajando y no quiere volver a matar. Ha descubierto que el amor es algo más importante que una serie de imposiciones.

El problema es que su amante es Erika Walter, la viuda de un agente secreto alemán. Y cuando decide reunirse con ella en Madrid, comienza una persecución en el que él es la pieza a cobrar.


Reaparece el agente norteamericano Bishop, con el que ya pudimos disfrutar en El violinista de Mauthausen. Robert Bishop, el espía estadounidense que ha ido dejando su alma a tiras por el camino durante la guerra a fuerza de mover a los agentes como peones de ajedrez, que se sacrifican en un momento dado si es necesario para obtener la victoria final. Frío, una máscara aparentemente sin sentimientos.«Con Bishop nunca podía estar segura de nada, y menos de lo que pasaba por su cabeza». (Página 203)

Y como contraste, frente a la figura de Bishop nos presenta la de Gregorio de León, periodista deportivo y agente comunista:

«Todavía era lo bastante joven e idealista como para no rendirse hasta encontrar a su amigo Martín Navarro. Tal vez ingenuo fuese la palabra adecuada, pero a Robert Bishop no le gustaba utilizarla porque en el fondo admiraba a la gente que, a pesar de todo, seguía creyendo en sus ideales, o en conceptos abstractos como honor y lealtad, que para él ya no significaban nada.» (Página 337)

IMPRESIÓN PERSONAL

Cuando hablaba de El violinsta de Mauthausen decía que es una novela que lo tiene todo, y de hecho si el autor no fuera español (sus apellidos de Pérez y Domínguez no dejan lugar a dudas), estaríamos hablando del próximo estreno cinematográfico.

En todo momento mientras la leía, no podía dejar de pensar en ella como en una película, muy probablemente en blanco y negro, con ciertas reminiscencias de Casablanca, un toque de La lista de Schindler, otro poco de El día más largo y alguna más.

Cuando nos habla Andrés Pérez Domínguez en la contraportada de que le gustan los libros con historias o de que piensa que la gente que lee ficción es para disfrutar y por tanto eso es lo que intenta conseguir en sus libros, no son sólo palabras. Porque no hay duda de que entretenimiento es lo que no vas a echar de menos en sus novelas.

Pienso que  si el autor no fuera español (sus apellidos de Pérez y Domínguez no dejan lugar a dudas), estaríamos hablando de un auténtico bestseller mundial.

Creo que deberíamos dejar a un lado los complejos y pensar que los bestseller de acción solo pueden venir de fuera, cuando en España tenemos autores que dominan el género, como son los casos de Juan Gómez Jurado y Andrés Pérez Domínguez.

Me ha gustado de un modo especial la ambientación que el autor hace del Madrid de principios de los años 50. Un Madrid de contrastes entre aquellos que podían gastar dinero en bares de lujo y los que tenían que malvivir en su día a día.

Lo que me resulta curioso es que la historia de amor no termina de convencerme, Si fuera una película, diría que no hay "química" entre los protagonistas, algo que en el papel no existe. Y sin embargo, el tremendo amor que el Capitán Navarro siete por Erika, no parece ser correspondido de igual modo por ella, de la que en el fondo no terminas de saber que piensa o que siente.

Una novela con la que seguro disfrutaréis.

Lectura facilitada por la Biblioteca Municipal de Móstoles

VALORACIÓN: 9/10

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